Una "Hiena" agresiva e influyente

Por Homero Aguirre Enríquez

La Crónica de Chihuahua
Octubre de 2011, 13:53 pm

Ayer por la tarde, un grupo de golpeadores alcoholizados y drogados, encabezados por Margarita Preisser Benitez, alias La Hiena, y varios de sus familiares cercanos, entraron violentamente a la Escuela Secundaria Juana de Asbaje, ubicada en el municipio de Chimalhuacán; lesionaron a decenas de padres de familia, maestros y estudiantes que ahí se encontraban, incendiaron varios salones, documentos de los alumnos y autos particulares; unos minutos después, recibieron con piedras, varillazos y bombas molotov a los policías municipales que acudieron al llamado de auxilio de quienes estaban siendo atacados, y que se habían dado cita en ese lugar para resguardar la escuela hasta que las autoridades educativas mexiquenses intervinieran para aclarar el destino de las cuotas que se ven obligados a pagarle a “la familia hiena” y para demandar que la institución dejara de ser un nido de malvivientes disfrazados de profesores.

El furioso y vandálico ataque, que tuvo un saldo de 30 heridos, fue ordenado por La Hiena para “castigar” a quienes le exigen cuentas claras y un funcionamiento académico relativamente normal en la escuela a la que mandan a sus hijos, peticiones que son absolutamente imposibles de cumplir para esta delincuente (amiga de Guadalupe Buendía La Loba y heredera de los restos del imperio de esa criminal encarcelada de por vida por asesinar a diez chimalhuacanos y herir a más de un centenar, en el año 2000), a la que lo único que le interesa es obtener dinero a como dé lugar de las fuentes que aún le quedan: algunos pepenadores, un tianguis lleno de basura y algunas escuelas a las que “ordeña” sistemáticamente. De ahí su furia asesina contra quienes ponen en riesgo sus ingresos provenientes de la Secundaria.

Pero hay un elemento verdaderamente preocupante: esta delincuente goza de protección oficial. En vez de respaldar la lucha cívica de las personas que protestaron contra La Hiena, y por lo cual recibieron de esta mujer una respuesta que puso en riesgo su vida, las autoridades políticas y policíacas del Estado de México las atacaron violentamente y favorecieron la causa de la Preisser. En efecto, en vez de perseguir a la banda criminal que asaltó la Secundaria y se encontraba incendiando la avenida principal de acceso al municipio (en nuestra página web hay fotografías y videos suficientes para probarlo), el destacamento de la policía estatal se introdujo a la escuela, en donde les franquearon el paso pensando que iban a ayudarlos, y golpearon con saña a los asombrados padres de familia, maestros y jóvenes integrantes de una organización ciudadana llamada Xitle, que aún no alcanzaban a reponerse del ataque del clan de las hienas padecido minutos antes.

Para el Movimiento Antorchista es indignante la agresión cometida por La Hiena contra ciudadanos chimalhuacanos, y es muy preocupante el manto protector que ya se empieza a tender desde algunas áreas del nuevo gobierno mexiquense, en las que la Preisser se ha desempeñado antaño como parte de la utilería formada por ella y otros pillos que se encargan de hacerle la guerra sucia a las organizaciones integrantes del Proyecto Nuevo Chimalhuacán, cuando así se los ordenan desde alguna oficina gubernamental. Nunca nos hemos tragado la píldora de que esos restos del caciquismo de La Loba no puedan ser erradicados; si persisten es porque desde el poder así lo han decidido.

Junto con esa actitud violenta de la policía estatal hacia las víctimas, reveladora de que aún persisten los vasos comunicantes de La Hiena con personajes con poder en el gobierno estatal mexiquense, se puso en marcha un operativo mediático para involucrar e incluso responsabilizar al Movimiento Antorchista de estos

hechos violentos en los que no tuvo nada que ver. Hay varios ejemplos, pero sólo escribo el más revelador: los editores del unomásuno se lanzaron a escribir un encabezado babeante de rabia en contra nuestra, en el que los hechos se califican como “terrorismo” y cínicamente se nos señala como los agresores, contradiciendo incluso lo que narran sus propios reporteros en las páginas interiores, a saber: “dicho centro escolar estaba ocupado por un grupo de padres de familia y maestros que desde días anteriores habían denunciado irregularidades... por lo que un grupo de golpeadores encabezado por la priista Margarita Preisser Echeverría, ingresaron con lujo de violencia al plantel, golpeando a la gente indefensa que se encontraba en el interior”. Este tipo de periodismo excrementicio no provoca terror, pero sí unas arcadas casi irrefrenables.

La maniobra no es nueva. En el año 2000, cuando La Loba y sus sicarios asesinaron a una decena de personas e hirieron de bala a un centenar más que acompañaban al valeroso luchador social Jesús Tolentino Román Bojórquez a tomar posesión como presidente municipal, pusieron en práctica el mismo modus operandi: presentar escenas de violencia y sus consecuencias sangrientas, y enseguida responsabilizar de ellas a los antorchistas. No por ser burdo, el nuevo ataque deja de ser injusto y peligroso; por eso, nos disponemos a hacer todo lo necesario para defendernos de esta nueva embestida, lo que incluye en primer lugar sumarnos a la manifestación convocada para el próximo miércoles por las organizaciones del Nuevo Chimalhuacán, en demanda de que se castigue a los herederos de La Loba que por alguna razón han visto vientos favorables para un nuevo padrinazgo.