Tres por la presidencia de la CEDH... y por el ’’dedazo’’

Por: Alejandro Salmón Aguilera


Tres por la presidencia de la CEDH... y por el ’’dedazo’’

La Crónica de Chihuahua
Marzo de 2014, 23:35 pm

Habíamos dicho en este mismo espacio que al Congreso del Estado se le vino encima el tiempo para renovar la presidencia y el consejo de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) y que podría convertirse en otro “Leyvazo” si no se aceleraba el procedimiento para convocar y seleccionar a los aspirantes.

Casi dos semanas después de nuestra advertencia, el Congreso por fin aprobó emitir la convocatoria, cuando faltan escasos tres días hábiles -cinco naturales- para que termine el mes de marzo. No hay que olvidar que el nuevo período al frente de la CEDH debe comenzar a más tardar el 25 de abril.

Tanto se tardaron los legisladores de la 64ª Legislatura en iniciar el procedimiento, que ya se “rebotó el agua”, como dicen los pescadores, dentro de la misma comisión encargada de garantizar el respeto a los derechos humanos y el acceso a las garantías individuales.

La lucha por quedarse al frente del CEDH, ahora sí como organismo autónomo, inició en las mismas entrañas del organismo con tres personajes que desde hace semanas se mueven con fuerza para quedarse con esa posición.

Hasta ahora, se han detectado movimientos dentro de la misma CEDH, con los primeros visitadores de Juárez y de Chihuahua: Adolfo Castro Jiménez y Santiago De la Peña Romo, respectivamente, así como el propio José Luis Armendáriz, quien no está impedido para ser electo para el cargo.

El problema es que todo apunta a que la designación será una réplica de los procesos simulados que hemos visto recientemente, como el del Ichitaip, donde los aspirantes llegan a la convocatoria cuando los cargos en disputa están prácticamente asignados.

Las cosas, sin embargo, ya no son como hasta antes de enero, ya que después del fallo del juez 8º de Distrito en contra del procedimiento usado por el Congreso para designar a dos consejeras titulares y cinco suplentes del Ichitaip, ahora se debe fundar y motivar no sólo la razón para designar al afortunado, sino para explicarle a los otros por qué ellos no quedaron.

Hace dos semanas, diversas agrupaciones de la sociedad civil del estado entregaron un escrito a los diputados del Congreso local y a los medios de comunicación en la que manifiestan que en la designación del nuevo titular se debe “evitar la simulación”, como ocurrió en la pasada Legislatura al designar a dos consejeras del Ichitaip, situación que daña la credibilidad institucional.

Además, exponen que el proceso debe ser transparente; debe contemplar la realización de audiencias públicas y la participación de la sociedad civil. La pregunta es si con tan poco tiempo disponible: menos de un mes, habrá margen de maniobra para convocar, revisar documentos, analizar los perfiles de los aspirantes y elegir a un presidente que no sea producto del simple “dedazo”. El reloj corre y parece que ya se pasó la hora para cumplir con todo ese requisito.