Secretaría de Salud tiene bajo vigilancia a dos millones de obesos

**Quien crea que vamos a solucionar este problema en uno o dos años no tiene idea de cómo es la enfermedad, señala Pablo Kuri, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud

La Crónica de Chihuahua
Enero de 2016, 14:00 pm

La Secretaría de Salud (Ssa), a través de la Estrategia Nacional para la Prevención y Control de Sobrepeso, Obesidad y Diabetes, ya cuenta con algunos resultados: atiende a 2 millones de personas en algunas de sus 12 mil unidades, de los cuales 900 mil han logrado elevar de 25 a 40 por ciento el control de su diabetes

Pablo Kuri, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, explicó que la estrategia federal contará este año con un presupuesto de mil 200 millones de pesos.

Una de las prioridades de ese programa federal es evitar que los problemas metabólicos afecten la viabilidad financiera del país debido a lo costoso que es controlar ese tipo de enfermedades crónicas.

Los obesos que desarrollan diabetes, por ejemplo, disminuyen el riesgo de sufrir ceguera, amputaciones o afectaciones renales, entre otras complicaciones de las enfermedades metabólicas que, según cifras oficiales, causan en México más de 85 mil muertes al año y gastos superiores a los 100 mil millones de pesos.

"Eventualmente la situación que generan enfermedades como la diabetes y sus complicaciones puede llegar a convertirse en un problema muy serio de viabilidad del sistema de salud", explicó Kuri en entrevista.

La estrategia

El funcionario federal detalló que la estrategia se centra en tres pilares: la campaña Chécate, Mídete y Muévete, que ha tenido un impacto de recordatorio en 80 por ciento de la población; la creación de una red de excelencia de 12 mil unidades médicas, y las medidas de regulación de etiquetado, prohibición de publicidad e impuestos a bebidas y alimentos altamente calóricos.

La Ssa levantará una encuesta sobre males crónicos para evaluar la efectividad de la estrategia lanzada a finales de 2013.

Por su parte, el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) dará a conocer la forma en la que estas medidas disminuyeron hasta en 12 por ciento el consumo de bebidas azucaradas —considerando que el promedio es de 163 litros de refrescos al año por persona— y también se elevó hasta 6 por ciento el consumo de agua, cifra que aumentará con el proyecto de la Secretaría de Educación Pública de colocar bebederos en más de 220 mil planteles.

"Hay tres metas fundamentales de la estrategia: una es que el control metabólico suba de 25 a 33 por ciento, parece poco, pero 7 por ciento es un montón... Otra es que la población vaya a su revisión y a sus pruebas, eso lo podremos saber a través del sistema de información. La tercera es garantizar que haya el abasto de los insumos para el diagnóstico", detalló Kuri.

Solo 5 por ciento

Si bien, aclaró, atender a 2 millones de personas dentro de la estrategia federal, sin considerar lo que están haciendo IMSS e Issste, abarca solo 5 por ciento de la población con obesidad y sobrepeso, que oscila en 49 millones de personas, se están consolidando los andamiajes esenciales para que a largo plazo se contenga este problema de salud.

El funcionario explicó que una de las razones por la que solo han llegado a 2 millones de personas, es que la gente sencillamente "no va", por lo que se intensificarán las campañas de información y sumado a ello se está operando un Observatorio Nacional de Enfermedades Crónicas, que determinará cuáles son las necesidades a atender.

"Cuando se cumplió el segundo año de la estrategia nos dijeron que era un fracaso. Quien dice eso no tiene idea de cómo funciona el tema de obesidad, diabetes y sobrepeso. Es muy complejo y lleva tiempo. Tampoco la gente se volvió obesa en un año. Nos llevamos décadas, este problema se comenzó agudizar en los 80 y estamos en 2015", subrayó Kuri.

"Hace 35 años empezó el problema; quien pretenda que lo vamos a solucionar en un año o en dos no tiene idea. Estamos poniendo todo el andamiaje programático y de operación para que, si se le da la continuidad, con los matices que se deban de hacer y las correcciones que se tengan que implementar, se vaya viendo eventualmente un cambio hacia abajo de los índices de obesidad y sobrepeso en cinco, 10 o 15 años".

Para Kuri, el problema de la obesidad requiere de intervenciones múltiples, "no se resuelve como si se tratara de una vacuna que se aplica y la gente se inmuniza. Aquí no, hay que educar a la gente, tiene que cambiar sus hábitos; debemos dar información en los etiquetados... hay muchas cosas que se deben hacer al mismo tiempo", concluyó.