Se trafica con seres humanos en las rutas de transporte

**Paga de 7 a 30 mil dólares por pasar territorio de México, cada ilegal que va a Estados Unidos.


Se trafica con seres humanos en las rutas de transporte

La Crónica de Chihuahua
Junio de 2011, 10:59 am

México, D.F.- Cada año, 140 mil migrantes cruzan la frontera entre México y Guatemala para alcanzar una mejor vida en Estados Unidos. Para lograrlo, utilizan una red de choferes de autobús y agentes de vigilancia migratoria que trabajan en complicidad con grupos de traficantes de personas.

Las líneas de transporte de pasajeros en el sur de México son el método más utilizado para llegar a Estados Unidos de manera ilegal desde su frontera con Centroamérica.

Gerónimo, chofer de una línea de autobuses de primera clase que transita en todo el territorio mexicano, explica que participar en el tráfico de indocumentados y ganarse un “dinero extra”, sólo es cuestión de querer hacerlo, y que muchos de sus compañeros quieren. Los contactos para hacerlo –señala– los tienen todos, “aunque no todos le entran”.

“Al coyote (traficante) casi nunca lo ves porque toda la operación se hace por teléfono. Los teléfonos los tienen los choferes, y si es la primera vez que quieres llevar un pollo (migrante), pides el contacto y cualquiera te lo da”, explica. Añade que no hay rivalidad entre choferes “porque mercancía siempre hay”.

El secretario de Gobernación, Francisco Blake Mora, dio a conocer el pasado 19 de mayo que cada año aproximadamente 140 mil migrantes entran de forma ilegal México, a través de los 572 mil 986 kilómetros de frontera que hay con Guatemala.

En declaraciones a visitadores de derechos humanos y ante ministerios públicos, ofrecidas al ser interceptados por autoridades mexicanas, los migrantes han señalado que quienes buscan transitar por estas rutas -más cortas y seguras-, deben pagar entre siete mil y 30 mil dólares, dependiendo del país de donde provengan, para poder llegar a Estados Unidos.

LAS RUTAS DEL TRÁFICO DE PERSONAS

Las rutas de servicio de transporte terrestre más utilizadas para el tráfico de personas son las que parten de ciudades fronterizas con Guatemala, como Tapachula-Tuxtla Gutiérrez (hacía la capital de Chiapas), y Tuxtla Gutiérrez-Ciudad de México.

Cifras del Instituto Nacional de Migración (INM) indican que Chiapas es la entidad donde más indocumentados son interceptados. En 2010, la cifra fue de poco menos de 25 mil. El resto, que equivale a 318 diarios, logró cruzar el estado.

“Si te asignan esa ruta, le llamas al coyote y preguntas cuántos pollos tiene; tú le dices cuántos quieres, cuántos vas a llevar en tu camión. Dos, tres o cuatro es lo normal, pero hay quienes suben hasta 14 en una sola corrida”, refiere Gerónimo.

Por transportar indocumentados de la capital de Chiapas a la Ciudad de México, un chofer puede cobrar desde siete hasta 12 mil pesos. La tarifa más baja corresponde a los migrantes normales, es decir, provenientes de Guatemala, Honduras o el Salvador; los que son de otras nacionalidades “más fácilmente identificables”, como chinos o árabes, deben pagar más.

LOS METES EN LOS "CLAVOS"

Luego de acordar la cantidad de personas a transportar, se define el método para hacerlo, “les puedes comprar su boleto de viaje, y así van sentados entre el resto de los pasajeros; o los metes en los clavos”, es decir, compartimentos o recovecos no visibles del autobús, como el camarote, el porta llantas, o el espacio que hay entre el techo y las rejillas de aire acondicionado.

“Los que van en los clavos los tienes que subir en el trayecto que hay del encierro –lugar donde se guardan los autobuses– y la estación. Los subes emboletados, les entregas su boleto en la estación”. Siempre, antes de subirlos, relata, deben entregar el pago por el viaje.

Luego viene el recorrido y paso por los centros de control o garitas de vigilancia que tiene el INM a lo largo del país, generalmente son puntos fijos. “Cuando llegas a la garita el agente (del INM) te pregunta: ‘¿Cómo vas?’ Tu le respondes ‘Bien, voy libre’; o ‘llevo uno, dos’. Y le das su parte para que te deje pasar”, explica Gerónimo.

“Tengo compañeros que han tenido problemas y son detenidos. Aunque generalmente terminas negociando que te dejen libre si lo que transportas son pollos... Yo no sé de ningún chofer que este preso porque lo agarraron los migras. Los que han caído en la cárcel es porque se meten a llevar droga, eso es peligroso”.