Salió más barato tener una Consejería Jurídica que un Congreso

Por Alejandro Salmón Aguilera/ Ahoramismo.com.mx


Salió más barato tener una Consejería Jurídica que un Congreso

La Crónica de Chihuahua
Agosto de 2013, 12:43 pm

Los integrantes de la 63ª Legislatura se dicen satisfechos porque, a poco más de un mes de entregar la estafeta a sus sucesores/as, completaron la agenda legislativa en un 99 por ciento.

Bien por ellos, sólo que habrá qué dejar en claro un detalle: sí es cierto, aprobaron “el 99 por ciento” del paquete legislativo trazado en octubre del 2010, pero la mayoría de las reformas trascendentales salieron del Palacio de Gobierno y no de la Torre Legislativa.

Podríamos empezar por la reforma penal que estableció sanciones más severas contra las personas dedicadas al secuestro, aprobada en el inicio de la Legislatura y que también fue propuesta del Ejecutivo, pero no: esa fue sólo una reforma a un Código Penal ya existente.

Vayamos por las leyes, los nuevo marcos jurídicos completos que aprobó el Congreso en estos casi tres años: 34 leyes, en total, entre el año 2011 y lo que va del 2013. Nada mala la cifra, a razón de 11 nuevas leyes por año. Nada mala si hubieran surgido de la representación popular, pero no fue así: muchas de ellas surgieron del Palacio de Gobierno.

La culpa, desde luego, no fue del Ejecutivo, ya que tiene plenas facultades para iniciar leyes y tiene además la de promulgarlas. La responsabilidad, en dado caso, es de los 33 integrantes de la legislatura a punto de concluir que se tendieron en la poltrona a esperar a que la Consejería Jurídica les enviara las leyes, con la debida revisión constitucional que debe tener cualquier iniciativa.

En cambio, el mismo Ejecutivo tuvo qué hacer el trabajo de maestro regañón cuando regresó cinco leyes que eran notoriamente contrarias al texto constitucional y, por lo tanto, le hubieran causado al Gobierno del Estado un enorme desgaste jurídico, económico y político con la andanada de amparos perdidos que hubieran tenido qué soportar.

Es cierto, hubo leyes iniciadas por los diputados y otras más en las cuales intervinieron para hacer añadiduras a las iniciativas enviadas por el Ejecutivo, pero no quita el hecho de que la mayor parte del peso legislativo recayó en los hombros de la Consejería Jurídica del Estado.

Vistas así las cosas, tal parece que salió más barato y eficiente contratar a los 27 empleados de la Consejería Jurídica que los 14 millones 955 mil 008 pesos que le asignan de presupuesto anual, que los 255.6 millones que costó el Congreso, sólo en el 2013.

Esperemos que la próxima Legislatura también concluya con el orgullo de haber completado su agenda legislativa, pero que ésta surja de la iniciativa y análisis de quienes fueron elegidos para representar a los habitantes de la entidad.