Protocolo de seguridad no es para periodistas, sino para la policía

Por Alejandro Salmón Aguilera/ Ahoramismo.com.mx


Protocolo de seguridad no es para periodistas, sino para la policía

La Crónica de Chihuahua
Febrero de 2012, 16:13 pm

Este martes, el secretario de Gobernación, Alejandro Poiré, iba a estar en Ciudad Juárez a firmar el llamado “Protocolo de seguridad para periodistas”, antes de que se cancelara la visita, que se retrasa al parecer un día.

Poiré llegará a una ciudad donde ni la SEGOB, ni las fuerzas policíacas de cualquier denominación han sido precisamente los mejores amigos de la práctica periodística, y menos aún en las últimas semanas.

Es por eso que una gran cantidad de periodistas de Juárez se muestran renuentes a firmar dicho protocolo, porque—dicen—no se puede firmar algo con el gobierno si antes no se sancionan todos los abusos que se han cometido contra periodistas.

Por ejemplo, El Diario de Juárez, uno de los periódicos que más ha sufrido los efectos de la violencia urbana y de los abusos policíacos, hasta este lunes por la tarde, no había sido tomado en cuenta para la elaboración de ese documento.

Si alguien tenía boca para hablar y para proponer en torno a la seguridad de los periodistas, eran los de Juárez y en particular, los que trabajan para la empresa que ha resentido los “Efectos Leyzaola” con mayor rigor que otros medios de comunicación.

“Nunca como desde la llegada de Julián Leyzaola a la jefatura de la Policía Municipal (de Juárez), el sólo hecho de presenciar el trabajo de los agentes de seguridad y de portar una credencial había sido motivo de arresto”, dice el documento firmado por tres organizaciones de periodistas.

Tanto la Red de Periodistas de Juárez como la Asociación de Periodistas de Juárez y la Sociedad de Periodistas y Comunicadores denunciaron que al menos 12 periodistas han sido arrestados, esposados, maltratados por agentes policíacos en lo que va del año.

Con unas condiciones como esas, es difícil pedirle a un gremio que se siente con el Gobierno, sin previo diálogo, y firme algo que se llama “Protocolo de seguridad”.

La pregunta que surge de todo esto es ¿seguridad para quién? ¿Para los periodistas? Si es así, entonces que el señor Leyzaola y el alcalde de Juárez aclaren todos los abusos que han cometido sus agentes contra periodistas de esa ciudad.

Mejor que nos digan que realmente se trata es de tender una línea de cinta amarilla para limitar el campo de acción de los periodistas; que nos queda prohibido llegar a la escena del crimen antes que los periodistas; o que no debemos informarle a la sociedad que la violencia va, así sea con índices menores a los del terrorífico año 2010.

Si eso es lo que quieren del periodismo de Chihuahua, por lo menos, este medio se va a reservar el derecho de apoyar dicho protocolo, y se solidariza con los periodistas juarenses en su demanda de un trato digno de parte de las fuerzas policiales.