Pepenadores del Relleno Sanitario, en peligro mortal

**En heridas profundas o con suciedad, heces, tierra o fracturas expuestas, debe aplicarse un refuerzo de la vacuna contra el tétanos. Eso, o morir dolorosamente.


Pepenadores del Relleno Sanitario, en peligro mortal

La Crónica de Chihuahua
Junio de 2014, 14:31 pm

Por Froilán Meza Rivera

Chihuahua, Chih.- Exactamente el 50 por ciento, es decir, la mitad de quienes trabajan como pepenadores en el Relleno Sanitario, no se han aplicado la vacuna contra el tétanos, que es indispensable ante los enormes riesgos de salud que enfrentan ellos aquí.

El peligro de que se entierren un clavo oxidado o cualquier fragmento de metal, es algo cotidiano para ellos, y la única garantía de que no contraigan el tétanos es la vacuna.

De las 78 personas que se entrevistaron en este lugar de trabajo, 39 manifestaron que no se han puesto la vacuna. Refirieron sin embargo, que reciben con periodicidad la visita de enfermeras del Sector Salud para aplicárselas, pero no todos se interesan en inmunizarse contra este mal.

El tétanos es una enfermedad frecuentemente mortal, que es producida por una bacteria que afecta las terminales nerviosas y el mismo sistema nervioso central. En su fase aguda, el enfermo sufre de parálisis y espasmos ante de que se generalice la infección y muera.

¿Cómo prevenir?

El tétanos se puede prevenir con la simple aplicación de la vacuna.

Para los niños, esta vacuna se incluye dentro de la conocida Vacuna Cuádruple que se aplica a los 2, 4 y 6 meses de vida, con un refuerzo a los 12 meses de la última dosis. Al entrar los pequeños a la escuela, se les debe aplicar la vacuna Triple Bacteriana (DTP) hasta los 6 años, inclusive. De aplicarse luego de cumplidos los 7 años, debe utilizarse la vacuna Doble. A los 16 años debe entrar un nuevo refuerzo.

Y después, se inyectan refuerzos cada 10 años con vacuna Doble. Y personas con antecedentes de 3 o más dosis aplicadas anteriormente (sin tomar en cuenta la edad), solamente deben aplicarse una dosis cada 10 años y durante toda la vida. En algunos casos de heridas graves, que sean profundas o se contaminen con suciedad, heces, tierra o saliva, o bien heridas punzantes, grandes quemaduras o fracturas expuestas, debe aplicarse un refuerzo de la vacuna.

Eso, o morir dolorosamente.