PAN y PRD deben enfrentar intereses en reforma de telecomunicaciones

Javier Corral

La Crónica de Chihuahua
Febrero de 2013, 17:44 pm

Chihuahua, Chih.- La reforma en materia de telecomunicaciones no sólo es la prueba de fuego para el presidente Enrique Peña Nieto, sino para los dirigentes nacionales de los partidos de oposición, Gustavo Madero y Jesús Zambrano, manifestó el senador Javier Corral Jurado, tras señalar que dicha reforma “nos va a decir de qué están hechos” cuando se trata de enfrentar intereses multimillonarios y políticos de ese calado.

El legislador federal por Chihuahua dijo que espera que al Congreso llegue “una iniciativa pareja que toque por igual a los agentes dominantes de los sectores tanto de las telecomunicaciones como de la radiodifusión”, pues “una reforma que profundice sólo en contra de Slim y que toque matizadamente a las televisoras, sería un engaño”.

Aseguró que el peligro y la mayor amenaza para la democracia y la vida institucional del país no es Carlos Slim, sino el duopolio de la televisión.

“A Slim hay que regularlo con reglas específicas y asimétrica para rescatar a los consumidores en ahorro y dinero en materia de telefonía, pero a las televisoras hay que regularlas en términos de concentración y de propiedad cruzada de medios. Ese es el gran reto de la consolidación democrática de México”, insistió.

Javier Corral aseveró que la reforma de Telecomunicaciones que reciba el Congreso “no será ni camisa de fuerza, ni techo. Es piso y de aquí lo que nos llegue para arriba todo lo que queramos aumentar, lo que no se va valer es que alguien quiera bajarle”.

Por otra parte, al referirse a la sesión solemne del Congreso para conmemorar el centenario del aniversario del Ejército Mexicano, el panista señaló que en este evento el Presidente de la República debe estar presente únicamente como testigo de honor, “con el respeto que el protocolo de una cámara republicana brinda a un Presidente de la República”, pero no para hacer uso de la tribuna del Senado.

“Si el Presidente quiere hacer uso de la tribuna debe someterse al reglamento de debates y no debe ser uno más de sus escenarios de lucimiento personal. La tribuna del Senado es para discutir y debatir los problemas de la nación, no sólo para dar un discurso”.

“Yo no me opongo a que el Presidente de la República, cuando esté dispuesto a ese diálogo, pueda intervenir en la tribuna, pero que se someta a un formato de interacción entre él y los legisladores”, apuntó.

Incluso, comentó que uno de los temas pendientes de discusión es que el Presidente pueda regresar al Congreso a rendir cuentas del estado que guarda la nación. “Se ha pensado que pueda volver a dar su informe, pero que ese informe sea sometido a un verdadero ejercicio de rendición de cuentas y no sólo a una ceremonia de escenificación, de culto a la figura del Presidente, sino que haya intervenciones de los grupos parlamentarios y que el Presidente pueda dar respuesta. Eso sí es una auténtica división de poderes y ese es el dialogo al que deberíamos aspirar”, finalizó.