Nueva estratagema electoral de Obama:Nuevo posicionamiento migratorio

EE UU dejará de expulsar a jóvenes inmigrantes sin papeles El principal requisito es tener entre 16 y 30 años y llevar al menos 5 en EE UU

La Crónica de Chihuahua
Junio de 2012, 10:49 am

La Administración de Barack Obama frenará las deportaciones y concederá visados de trabajo a todos aquellos que llegaron a EE UU siendo niños y han vivido desde entonces sin papeles y con el temor a ser deportados. Se estima que la medida podría afectar a cerca de 800.000 personas que a día de hoy son inmigrantes ilegales a pesar de estar plenamente integrados en la sociedad. El anuncio de Obama –que se espera suceda sobre las 13.15 pm hora de Washington- arrincona medidas que se estudiaban en el Congreso y consigue en parte los objetivos de la llamada Dream Act.

La decisión de Obama llega en un momento en el que la lucha por el voto hispano de cara a las elecciones presidenciales de noviembre es clave. Estados como Colorado, Nevada y Florida –considerados swing states, que no tiene decidido el color de su voto- podrían definir la balanza hacia el Partido Republicano o el Demócrata dependiendo del giro por el que opte el electorado latino, que en 2008 apostó por Obama. Pero la crisis económica y el hecho de que el presidente no haya sido capaz de sacar adelante una legislación sobre inmigración ha decepcionado a este importante grupo demográfico, la primera minoría de EE UU.

“Sin duda es una demostración de liderazgo”, ha declarado la estratega demócrata Kiki Mclean, muy satisfecha con la medida. El año pasado, EE UU alcanzó una cifra récord de deportaciones, expulsando del país a más de 390.000 personas que vivían en situación irregular. Sin duda es una decisión electoralista, pero como apunta Mclean, “Obama no puede dejar de ser presidente por estar en campaña”.

Bajo el nuevo plan de la Administración, no serán objeto de deportación todos aquellos inmigrantes ilegales que llegaron a EE UU antes de cumplir 16 años y que en la actualidad son menores de 30; que hayan estado en el país al menos durante cinco años continuados; que no tengan historial delictivo y que estén estudiando o se hayan graduado en la enseñanza secundaria o sirvan en las filas del Ejército.

La nueva política no es un camino para lograr la ciudadanía pero frena en seco el temor a las deportaciones y concede la capacidad para poder trabajar de forma legal en el país. El anuncio ha sido realizado por Janet Napolitano, la secretaria del Departamento de Seguridad Nacional, medida que llega una semana antes de que Obama se dirija a la Asociación Nacional de Representantes Latinos que tendrá lugar en Orlando, Florida, según informa el diario The Washington Post. Mitt Romney, el candidato republicano a la Casa Blanca, se dirigirá a ese mismo grupo el próximo jueves.