No se van fuerzas federales de Juárez: Blake Mora

Pese a los ataques de estos hacia las autoridades juarences y las quejas que la CEDH y la CNDH han recibido

La Crónica de Chihuahua
Julio de 2011, 18:15 pm

Chihuahua, Chih.- El Secretario de Gobernación José Francisco Blake Mora, reafirmó que las fuerzas federales no van a abandonar Ciudad Juárez ni a sus ciudadanos ante el fenómeno delincuencial que vive aquella ciudad.

“Las fuerzas federales siempre estarán ahí para atender los asuntos de su competencia y apoyar al Gobierno estatal en la tarea de proveer mayor seguridad, así como el proceso de fortalecimiento institucional” dijo Blake Mora.

Esto en el marco de su reunión con el gobernador de Chihuahua César Duarte Jáquez. Estas declaraciones vienen, después del ataque que recibiera Julián Leyzaola Pérez, quien es Secretario de Seguridad Pública Municipal de Ciudad Juárez.

Y es que cabe contabilizar que ya en dos ocasiones, el mismo Héctor Murguía Alcalde de Juárez fue atacado por elementos federales, de esta manera el ataque que recibiese Leyzaola el día de antier fue el tercero que los representantes de la PFP despliegan en contra de autoridades juarenses.

Leyzaola fue víctima de un atentado por parte de elementos de la Policía Federal Preventiva en calles de ciudad Juárez, esto después de atender un hecho violento en la Zona Centro de la ciudad, cuando se dirigía hacia el CERESO Municipal, por la avenida Barranco Azul.

Al acercarse al penal escuchó ráfagas al interior del mismo y tan solo unos segundos después volvió a escuchar otras ráfagas, mismas que estaban directamente dirigidas a la unidad en la que se movilizaba.

Los disparos procedían de unidades pertenecientes a la Policía Federal, ordenó que se detuviera el vehículo y al cesar los disparos, se acercó al primer elemento que vio y pidió una explicación, pero por toda respuesta recibió una negativa.

También hay que recordar, que en semanas pasadas visitadores de la Comisión Estatal y Nacional de los derechos humanos, estuvieron en los CERESOS del Estado, por quejas hacia policías federales, por parte de internos.