Manifestación en la PGR, exigen alto al crimen y la represión en el Estado de México

*Tres mil manifestante pedirán que la PGR encuentre con vida al señor Manuel Serrano, raptado desde hace casi 2 meses * El móvil del secuestro no es el dinero, sino aterrorizar a un grupo social que exige sus derechos


Manifestación en la PGR, exigen alto al crimen y la represión en el Estado de México

La Crónica de Chihuahua
Noviembre de 2013, 11:37 am

Más de tres mil antorchistas , junto con familiares y amigos de la familia Serrano Hernández, nos manifestaremos hoy en la Ciudad de México, en las oficinas centrales de la Procuraduría General de la República, en donde pediremos al titular de la misma, Lic. Jesús Murillo Karam, que esa dependencia concluya las investigaciones y encuentre con vida al señor Manuel Serrano Vallejo, padre de Maricela Serrano Hernández, líder social y alcaldesa de Ixtapaluca, el cual desapareció el 6 de octubre del presente año, en circunstancias que apuntan más a una represión política que a un crimen por dinero.

Esta manifestación no es un acto repentino o injustificado sino una resultante de la gravedad del caso, del estancamiento en que han caído las investigaciones para dar con el paradero del secuestrado y del incremento de las agresiones en contra del antorchismo.

Prácticamente desde que se supo de la desaparición de don Manuel Serrano, nosotros lo hicimos del conocimiento de las autoridades judiciales del Estado de México, responsables directas de la investigación, pero también pedimos, a través del subsecretario Lic. Luis Miranda Nava, la urgente intervención de la Secretaría de Gobernación y del titular de la Procuraduría General de la República. A todos ellos, mediante desplegados públicos, en entrevistas directas y en las propias investigaciones formales, les transmitimos nuestros argumentos y evidencias para destacar, en primer lugar, que el señor Manuel Serrano no era secuestrable, dada su evidente y pública condición de modesto vendedor de periódicos y revistas, actividad que ha realizado toda la vida y que le aporta ingresos tan modestos que no son un atractivo para quienes buscan dinero fácil y abundante, de lo que deducimos que el móvil del secuestro por dinero tenía probabilidades casi de cero.

Además, expusimos lo más detalladamente que se pudo, sin señalar directamente a nadie y sólo con el propósito de orientar a los investigadores sobre todas las pistas posibles, el contexto social en que se dio el secuestro, narrado cronológicamente y compuesto: a).- de diversas agresiones y amenazas de muerte contra Maricela, sus colaboradores y compañeros durante toda la campaña para llegar a ser presidenta de Ixtapaluca, y ya como presidenta en funciones; b).- del bloqueo administrativo por parte del gobierno estatal de los recursos destinados a la administración municipal de Ixtapaluca y Chimalhuacán, gobernado también por un antorchista, así como la cancelación de muchas obras que eran compromisos firmados por diversos funcionarios de gobierno del estado, y que beneficiarían a cientos de miles de personas afiliadas al Movimiento Antorchista y a muchos cientos de miles de mexiquenses más, no agremiados a nuestras filas. c).- las palizas, heridas de bala, destrucción de vehículos, retención ilegal de más de 200 unidades, y seis asesinatos, delitos cometidos impunemente contra transportistas que sólo piden que se les reconozca como una asociación legal con derechos a trabajar y rutas bien definidas fuera de la tutela del "Zar del transporte", Axel García Aguilera d).- la agresión a balazos contra un funcionario del Ayuntamiento de Ixtapaluca, las amenazas contra los responsables de la seguridad del municipio, la organización de “protestas lideradas por quienes perdieron la presidencia, el incremento de los mensajes anónimos e injuriosos contra la alcaldesa, y la “siembra” de dos cadáveres, jamás identificados, con amenazas de muerte contra ella y sus seguidores. e).- el allanamiento de diversos domicilios, incluido el de la hija mayor de la Lic. Maricela Serrano, ocurrido el mismo día y hora que secuestraron a don Manuel.

Todo este clima social siniestro fue hecho del conocimiento de los investigadores, estatales y federales. Lo que ha ocurrido posteriormente ha venido a confirmar que el “secuestro” de don Manuel Serrano no fue una fechoría más del “crimen organizado”, es decir, que no se trató de un chantaje criminal para cobrar un jugoso rescate a cambio de su vida, sino que se trata de algo mucho más grave que pone a la orden del día la posibilidad de que el país se esté precipitando a una especie de fascismo criollo, en el que todos los mexicanos quedamos a merced de “escuadrones de la muerte” sin que haya poder o institución que quiera o pueda librarnos del peligro.

En primer lugar, los presuntos secuestradores no mostraron la conducta típica de una banda que lo que quiere es lograr dinero, como se demostró cuando la negociación llegó al punto de la entrega del rescate, cuyo monto y condiciones se aceptaron pero que no se concretó, porque, contraviniendo el comportamiento típico de cualquier delincuente que ya siente segura una cantidad de dinero, éstos ya no se comunicaron.

Aún más, ése mismo día, cuando todo parecía indicar que se estaba cerca de un acuerdo con los secuestradores de don Manuel Serrano Vallejo para conseguir su liberación, el señor Procurador de Justicia del Estado de México, sorpresivamente, formuló una exigencia insólita: que la alcaldesa de Ixtapaluca, Maricela Serrano Hernández, hija de don Manuel, entregara a las autoridades federales (sic) las pruebas de sus “acusaciones” en contra del gobernador, Dr. Eruviel Ávila Villegas. Fue inútil aclarar al alto funcionario que tal exigencia era totalmente improcedente por cuanto tales “acusaciones” jamás existieron, como puede documentarse fácilmente en la prensa; él se mantuvo en sus trece y se limitó a recordar a todos que era el único y máximo responsable de esclarecer el secuestro. Los interesados en la vida de don Manuel se retiraron con la sensación de que alguien quería “reventar” el proceso. Desde entonces, hace más de un mes, no se ha tenido ninguna noticia, de ninguna especie sobre don Manuel y sus captores.

En cambio, al mismo tiempo que los secuestradores cortaban toda comunicación con la familia del raptado, sorpresivamente aparecieron en varios estados del país decenas de anuncios “espectaculares” (en el oriente mexiquense, los anuncios eran resguardados por patrullas de la policia estatal) e inserciones en páginas de internet conteniendo una campaña confeccionada con todas las patrañas, calumnias y mentiras aparecidas en diversos medios de comunicación, algunas con una antigüedad mayor a los 20 años, sin que nadie se haga cargo de firmar con su nombre las acusaciones y responder de ellas ante autoridad competente. Nuestra denuncia judicial ante la PGR sobre esos hechos, hasta la fecha no ha tenido la menor atención y mucho menos hay algún detenido o presunto responsable de calumniar e incitar al odio social y al linchamiento a los antorchistas. En vez de amainar la agresión, nuevos ataques se suman a los ya citados; por ejemplo, el 17 de noviembre fueron atacados con bombas molotov, en el Circuito Exterior Mexiquense, varios vehiculos que transportaban pantallas propiedad de un publicista que labora con la organización, en donde se acababa de proyectar un video con el recuento de los incumplimientos y agresiones sufridas por la organización en el Estado de México.

Así pues, cualquier persona desprejuiciada puede darse cuenta que la situación amerita una verdadera y urgente intervención de la Procuraduría General de la República y de la Secretaría de Gobernación, instancias a las que hemos acudido muchas veces a dar cuenta puntual de cada agresión, pero hasta el momento con nulos resultados. Exigimos que se devuelva a don Manuel Serrano a su familia, y que se detenga la represión contra millones de mexiquenses que forman este muy numeroso grupo social aglutinado en torno a los principios y la práctica social del antorchismo, que hoy más que nunca reitera la urgencia de hacer de México un país más justo, democrático y verdaderamente justo; ideal diametralmente opuesto a las prácticas represivas, antidemocráticas y fascistas que aquí denunciamos.

MUY RESPETUOSAMENTE
LA DIRECCIÓN NACIONAL
DEL MOVIMIENTO ANTORCHISTA