Los obreros y su tarea como clase proletaria

Por Eduardo González Galván


Los obreros y su tarea como clase proletaria

La Crónica de Chihuahua
Diciembre de 2014, 09:25 am

Con la revolución industrial de Inglaterra, cambiaron las formas de producción y organización del trabajo gracias a la introducción de nuevas tecnologías, lo cual dio origen a la organización en sindicatos. “Tradeunions” para los ingleses. En México, la aparición del proletariado industrial ocurrió entre 1876 y 1911 como consecuencia de su tardío desarrollo industrial.

Prohibición, existencia clandestina y tolerancia, fueron etapas de la organización sindical en México y otros países. La ausencia legislativa en materia laboral, antes de la Revolución Mexicana en 1910, dificultó la existencia de los sindicatos, no así la acción colectiva de los trabajadores que ejercieron la huelga aun sin ser derecho.

Con el advenimiento de la Casa del Obrero Mundial y la creación del Departamento de Trabajo en 1912, surgieron las bases que prepararían el terreno para la organización jurídica del sindicalismo en la Constitución de 1917, artículo 123, fracción XVI, del apartado A. Con base en el derecho de asociación profesional en la ley fundamental, comenzaron a estructurarse para nacer en la vida jurídica los sindicatos; la CROM, CGT, los sindicatos católicos, la UGOCM, la CTM y otros.

Etimológicamente la palabra sindicato proviene del griego síndicos, de sin "junto", y un derivado de dike "justicia". En un amplio sentido, asociación de personas morales o físicas que tiene por objeto la representación y la defensa de sus intereses comunes. Sin embargo, en su acepción corriente, se trata de asociaciones de obreros y de empleados de una profesión (sindicato de oficio) o de una rama industrial (sindicato de industria), que se agrupan con el propósito de defender sus derechos e intereses inmediatos, como salarios, duración de las jornadas de trabajo, condiciones de trabajo, seguridad, entre otras cosas.

Trueba Urbina aporta a la historia la fecha en que se fundó la primera asociación de tipo profesional: “Círculo de obreros de México”, un 16 de septiembre de 1872. Esta organización llegó a contar en sus filas, dos años más tarde, con más de ocho mil trabajadores; en su mayoría artesanos y obreros de hilados y tejidos. El 5 de marzo de 1876, fue fundada la Confederación de Asociaciones de Trabajadores de los Estados Unidos Mexicanos, que fortaleció la unidad de los trabajadores, constituyéndose después, en 1890, la Orden Suprema de Empleados Ferrocarrileros Mexicanos, la Unión de Mecánicos Mexicanos, la Sociedad de Hermanos Caldereros Mexicanos, la Liga Mexicana de Empleados de Ferrocarril y otras más.

En Cananea se fundó la Unión Liberal Humanidad y, en Orizaba, Veracruz, el Gran Círculo de Obreros Libres, ambos organismos fueron los protagonistas de las huelgas de Cananea y Río Blanco, estos últimos con influencia del pensamiento de Ricardo Flores Magón. En 1911, se constituyó la Confederación Tipográfica de México. En 1912 se fundó el Departamento del Trabajo y se estableció la Casa del Obrero Mundial que en 1913 conmemoró “por primera vez en el país, el 1o. de mayo, exigiendo la jornada de ocho horas y el descanso dominical”.

Los dirigentes sindicales están llamados a interpretar y obedecer lo que dice el grueso de los obreros. El elemento decisivo en un sindicato está constituido por sus afiliados, cuya voluntad debe modelar la orientación del organismo gremial, pero en México la clase obrera, y en mayor medida los sindicatos, se mueve bajo la presión de las clases económicamente dominantes y del Estado.

Ese accionar diferente entre la base obrera y la dirección burocratizada responde al hecho de que estas últimas no sólo no repelen la influencia de la burguesía y del Estado, misma que los corrompe y los descalza, sino que tienden -y lo logran- emanciparse del control de las bases. Consecuentemente las direcciones no corresponden a las bases; y se convierten en producto del fraude, de las maniobras y de la impostura de las burocracias, que no pocas veces actúan apuntaladas por la patronal y el Estado. La victoria de las burocracias se convierte en primordial para que la clase dominante y el Estado puedan controlar y hacer enmudecer al movimiento obrero organizado.

Sin embargo, no se puede enmudecer a la clase obrera. Históricamente ha buscado, a pesar de las circunstancias sociales, conseguir mejores condiciones laborales. Desde hace 40 años Antorcha Revolucionaria ha emprendido una lucha constante contra la pobreza en México, y esta lucha ha hecho que los maestros crearan una opción gremial: Antorcha Magisterial. Así como los docentes, los obreros también están buscando mejores condiciones laborales y durante esa búsqueda se ha conformado el frente obrero, que ha llevado la lucha sindical en varias empresas: Antorcha Obrera.

Antorcha Obrera

Este frente del Movimiento Antorchista recientemente libró dos importantes luchas saliendo avante después de jornadas muy largas y duras. En los estados de San Luis Potosí y Puebla se luchó para que se reconocieran los sindicatos que eligieron los propios obreros.

Particularmente en Puebla, la ciudad de Atlixco tiene profundas raíces en sus luchas sindicales. A finales del siglo XIX Atlixco se destacó en el estado como una de las regiones que concentraba más del 40 por ciento de la producción textil, teniendo las cuatro fábricas más importantes en este rubro: El León, Metepec, La Carolina y La Concepción. La lucha sindical en Atlixco llevó a los obreros a buscar mejores condiciones y prestaciones laborales en 1906 y 1907.

En Atlixco la corrupción infectó la estructura de los sindicatos, pero en 2008 -los obreros conscientes de su situación y de la pobreza que se ha ido acrecentando- decidieron buscar el apoyo del antorchismo atlixquense que, a través de su frente obrero, enarboló la lucha sindical de los trabajadores de la empresa Mex-Mode.

En ese año, pese a las represiones y de las maniobras de la empresa, los obreros hicieron valer su derecho sindical. Después de 6 años -en julio- los trabajadores se enfrentaron a una nueva maniobra de la empresa, que despidió injustificadamente a tres integrantes del ya electo comité sindical; durante meses los patrones se valieron de artimañas para evitar a toda costa que se diera el nombramiento al entonces electo Secretario General del Sindicato, Sebastián Tecuatzín Carranza.

Los trabajadores del SITEMEX decidieron dar su apoyo una vez más a los integrantes de su comité, quienes fueron despedidos en el mes de junio poco antes de la nueva elección.

Una vez más, los obreros contaron con el apoyo Antorcha Obrera. Después de una semana de paro laboral en apoyo a la recontratación de los tres obreros despedidos que formaban parte del comité previamente electo, la voz popular se hizo presente y ratificó a su Secretario General del SITEMEX, Sebastián Tecautzín Carranza.

Esta lucha ha demostrado que el pueblo trabajador de México está dispuesto a sacar adelante a nuestra patria, pero que no está de acuerdo en que siempre sea éste quien pague el precio, que es muy alto, mientras que la clase en el poder no está dispuesta a otorgar una estabilidad laboral a sus trabajadores.

“Después de la elección del 7 de julio y conocer los resultados, inmediatamente comenzamos a trabajar en coordinación con los empresarios y ejecutivos de Mex Mode para resolver muchos de los problemas internos y externos que se venían arrastrando como entrega de uniformes, incentivos y préstamos”, dijo Tecuautzin Carranza durante su primer informe el pasado 5 de octubre, todo esto estipulado en el contrato colectivo de trabajo.

De manera externa se logró una reunión con el subdirector de la clínica No. 34 del Instituto Mexicano del Seguro Social, Vicente Cárdenas, además se hicieron visitas ante del DIF Municipal para apoyar a las madres trabajadoras e incursionarlas a talleres de panadería, confección y prevenciones alimentarias.

En contraste con administraciones pasadas de este sindicato obrero, en el encabezado por el antorchista Sebastian Tecuautzin “cada representante está iniciando sus actividades con responsabilidad y seriedad”, lo que da confianza a sus agremiados para no vacilar cuando tengan alguna duda o queja y poder dirigirse a alguno de los miembros del comité sindical o la Comisión de Vigilancia y Justicia para tratar el asunto a la brevedad posible.

El actual comité del sindicato que aglutina a alrededor de 500 obreros contribuye al desarrollo personal y colectivo, mejorando sus condiciones laborales para mejorar su calidad de vida. El trabajo del Frente Obrero, no sólo en Atlixco sino a nivel nacional, “es muy importante. Estamos conscientes de que es primordial educar a los obreros, concientizarlos de la problemática nacional y hacerles ver que ellos, históricamente, han sido los precursores de las transformaciones de la sociedad, es una tarea ardua pero necesaria pues ante las condiciones sociales de nuestro país el pueblo debe de estar preparado para poder tomar la dirección de nuestra patria y darle el rumbo al que está destinado llegar que es una patria más justa, más equitativa y más solidaria”, comentó Miguel Lozada Juárez, asesor legal del sindicato y responsable del trabajo obrero del Movimiento Antorchista en Atlixco.