Los jóvenes sí tienen sexo peligroso

**Bajo el influjo de alcohol o sustancias, con desconocidos y sin condón.


Los jóvenes sí tienen sexo peligroso

La Crónica de Chihuahua
Diciembre de 2012, 14:40 pm

Chihuahua.- En México 54.3% de los universitarios han tenido, en al menos una ocasión, relaciones sexuales bajo los efectos del alcohol u otro tipo de droga. Un estudio del Instituto Mexicano de Sexología (Imesex) encontró que ésta y otras dos conductas de riesgo se presentan en ese sector de la población: el mantener relaciones sexuales con desconocidos (30.4%) y no usar condón (56.9%).

“Las tres conductas pueden presentarse al mismo tiempo incidiendo en la salud de las personas jóvenes, aun cuando se posea algún grado de instrucción en estudios universitarios, no es garantía de que se esté protegido, se tomen decisiones acertadas y se tenga una vida sexual responsable”, señala el estudio.

Paulina Millán, del Imesex, asegura en entrevista que las conductas de riesgo encontradas exponen a los jóvenes a embarazos no deseados y transmisión de enfermedades sexuales. La especialista explica que el problema consiste en que la atención en la salud siempre está puesta en los adolescentes y los adultos, pero el sector de los adultos jóvenes se descuida a pesar de que esta población tiene mayor facilidad para conseguir las drogas o un condón.

La encuesta se hizo en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Universidad del Valle de México (UVM), Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) y en la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM) entre 300 estudiantes, pero de acuerdo con la metodología utilizada, según los especialistas, sus resultados pueden representar un universo nacional.

De forma general, se observó que del total de estudiantes, 80.3% reporta haber tenido relaciones sexuales; siendo los 12 años la edad mínima en la que alguien inició su vida sexual y 27 años la máxima.

La frecuencia de relaciones sexuales entre los universitarios es muy diversa, siendo la mayor frecuencia “una vez al mes” (13.7%). En relación al número de parejas sexuales que han tenido, se registró que 3.1% no tenían pareja sexual, 44.1% de una a dos, 30.5% de tres a cinco, 14.5% de seis a 10, 5.1% de 11 a 20, y 2.7% de estudiantes reportaron haber tenido hasta ese momento más de 20 parejas sexuales.

Se encontró que existe diferencia significativa en el número de parejas sexuales siendo los hombres quienes más tienen parejas (2.48 mujeres, 3.18 hombres).

Cuando se les preguntó si usaban condón, sólo 43.1%, dijo que siempre, 24.9% dijo que lo usa más de la mitad de las veces que tiene relaciones sexuales, 9.1% la mitad de las veces, 14.2% menos de la mitad y 8.7% nunca lo usan.

A su vez, se les interrogó si cuando desean usar el condón lo han exigido, a lo que 80.6% lo han exigido y 19.4% no lo han hecho. “Esto deja una brecha considerable de personas vulnerables ante infecciones de transmisión sexual”.

Respecto a mantener relaciones sexuales bajo efectos del alcohol u otro tipo de droga se identificó que sólo 45.7% de estudiantes nunca lo han hecho en estas condiciones. Los hombres son quienes más tienen relaciones sexuales bajo efectos del alcohol u otro tipo de droga.

Esta información, según los especialistas, se aproxima a la obtenida en la Encuesta de Hábitos Sexuales del Latinoamericano (Grupo Diarios de América, 2010), donde se encontró que 73% de los entrevistados ha mantenido relaciones sexuales al menos una vez bajo los efectos del alcohol.

Concluyen que hace falta tener en cuenta la carencia de estudios que consideren este binomio: relaciones sexuales y consumo de alcohol y/o drogas. Además de la inclusión de programas escolares para estudiantes universitarios que extiendan la prevención y la sensibilización para evitar este tipo de conductas.

Recomendaciones
Las recomendaciones de los investigadores se resumen al hecho de que las personas pueden elegir alternativas y adoptar comportamientos que los protejan a fin de que conserven su salud.

Las capacidades de comunicación, negociación, asertividad pueden ayudar a los universitarios hombres y mujeres a evitar presiones sexuales no consentidas o fortalecer la intención de practicar sexo seguro que incluya, por cada relación sexual, el uso correcto del condón.