Las frutas y verduras eran más importantes en la dieta medieval islámica que en la cristiana

**.Por primera vez, un estudio arqueobotánico compara restos de alimentos de los siglos X y XI en tres ciudades: Lleida, Balaguer y Tortosa


Las frutas y verduras eran más importantes en la dieta medieval islámica que en la cristiana

La Crónica de Chihuahua
Febrero de 2015, 16:49 pm

La fruta era una parte muy importante de la dieta medieval islámica, más que en las zonas cristianas según un trabajo de investigación pionero en el campo de la agricultura de esta época liderado por la Universitat de Lleida (UdL) y publicado en la revista Quaternary International.

Por primera vez, un estudio arqueobotánico compara restos de alimentos de los siglos X y XI en tres ciudades: Lleida, Balaguer y Tortosa, asegura la Udl en un comunicado en el que precisa que el trabajo cuenta con la colaboración de investigadores de la Universidad de Basilea (Suiza) y la Autónoma de Barcelona.

Con respecto a la fruta, en los asentamientos islámicos hay mucha variedad, sobre todo en Lleida: la uva y los higos se consumían tanto frescos como guisados y secos, y en tiempo de hambruna se usaban las semillas para hacer harina y cocer pan de un alto valor nutricional.

Los investigadores también han encontrado restos de melocotón, melón, pepino, manzana, pera, oliva, almendra, piñones y granada.

Algunas de estas especies, según los expertos, ya se consumían en la época romana e incluso la ibérica, aunque no estaban tan extendidas.

Los resultados de estos yacimientos contrastan con las zonas cristianas ubicadas más en el norte, donde sólo se ha identificado el consumo de uva, melocotón, algarroba y almendra; en estas áreas se cultivaban menos frutas, plantas oleaginosas y especias.

Los restos de alimentos se encuentran mineralizados o carbonizados, y los investigadores los han procesado con una máquina de flotación y una columna de tamices antes de identificar unos sesenta géneros o especies de plantas cultivados o silvestres, algunos de ellos citados en las fuentes escritas.
Fuente: Europapress