La impunidad es hija de la corrupción del gobierno: obispo Vera López

**Para don Raúl no hay duda: la Iglesia debe hacer lo mismo que Jesús, vivir el modo de vida que vivió Jesús, tomar los riesgos que él tomó junto con su pueblo.


La impunidad es hija de la corrupción del gobierno: obispo Vera López

La Crónica de Chihuahua
Enero de 2011, 20:25 pm

Froilán Meza Rivera

Chihuahua, Chih.- La muerte de Marisela es un signo de la impunidad con que están actuando los criminales, impunidad que está siendo animada por la corrupción dentro del mismo gobierno, acusó esta noche el obispo José Raúl Vera López.

En reunión con las organizaciones civiles que lo invitaron a esta capital, Vera López señaló que “todos los que andan sueltos” matando, es por la corrupción del Estado. Entonces, ¿quiénes son los autores de la impunidad?, preguntó.

Y sacó a colación la anécdota de cuando el presidente Felipe Calderón les dijo a los embajadores, para que éstos lo difundieran por el mundo, que “no somos nosotros (el gobierno) los de la violencia y los asesinatos, que son los delincuentes”… Pues sí, dijo Fray Raúl Vera, “pero después de muchos años de vivir, me di cuenta de que es cierto lo que decía el obispo Samuel Ruiz, que existe una verdad ética, pero que junto a ésta existe también una verdad de los políticos”.

Al respecto, el también ganador del premio Bafto 2010, que entrega el gobierno de Suecia a personajes que se distinguen en el mundo por la defensa de los derechos humanos, trajo a colación el pasaje del Nuevo Testamento en que Poncio Pilato pregunta a Jesús: “¡Entonces!, ¿Tú eres Rey? Y Jesús le contesta: “Tú dices que lo soy, yo para eso nací, más vengo a reinar en los corazones de los justos; a transmitir la luz divina de la gracia y la verdad. Todo aquel que ame la verdad, que escuche mi voz”. Y Pilato sale entonces con una muestra de lo que el obispo Vera identifica como una “verdad política” (¡Desde entonces, fíjense bien!): Dice Poncio: “Pero, ¿qué verdad es ésa de la que me hablas?”

A los asistentes a esta reunión, en el local de El Barzón, el obispo de Saltillo dijo que “Es un privilegio estar aquí con ustedes, porque en Chihuahua, en medio de lo que están viviendo aquí, en Juárez y en Creel, es una verdadera esperanza conocer la manera en que ha reaccionado la gente”. Alabó la respuesta de la sociedad civil: “Aquí está la respuesta”, expresó, y ponderó la valentía de la gente que protesta y que no agacha la cabeza.

“Esa impunidad –agregó- no es de gratis, porque la corrupción en el gobierno es terrible, pero qué bueno que está también la respuesta de la gente, de la sociedad”. Citó el dicho de Santa Catalina de Siena, Doctora de la Iglesia y dominica como el propio Vera López, quien, nacida en 1347, en su época ya fustigaba a quienes hacen mercado con la carne humana, como los modernos políticos mexicanos. “El vacío se intenta llenar con dioses falsos: el mercado, la violencia, la corrupción ... Nuestro amor tiene que ser plenamente humano y no limitado a lo carnal”, decía Catalina Benincasa.

Fray José Raúl Vera López vino a Chihuahua porque este domingo 16 de enero, oficiará una liturgia religiosa, la Liturgia de la Palabra, en la banqueta en frente del Palacio de Gobierno, en honor de la activista sacrificada Marisela Escobedo, justo en el lugar en donde la asesinaron.

Según Vera López, la Iglesia no puede seguir ignorando el sufrimiento de sus ovejas, porque todas la ovejas en México están en riesgo, y la Iglesia tiene que defenderlas. Recordó ante su auditorio, cuando él mismo fue enviado a la Diócesis de San Cristóbal de las Casas en Chiapas, en tiempos de la insurrección zapatista, con la intención de contrarrestar la labor pastoral del obispo don Samuel Ruiz. Reconoció que, en contacto con toda aquella gente que día a día corría el riesgo de que la mataran el Ejército o los paramilitares, él cambió, y escogió el camino de la defensa del pueblo. “Llegó un momento en que pensé: O cambio, o me largo de aquí, yo soy indigno de estar aquí, y me dio vergüenza, por lo que decidí ponerme a caminar con ellos”.

Para don Raúl no hay duda: la Iglesia debe hacer lo mismo que Jesús, vivir el modo de vida que vivió Jesús, tomar los riesgos que él tomó junto con su pueblo.

(Enero 15, 2011)