Fallo contra el Ichitaip: golpe a la simulación

**El fallo del juez Ignacio Cuenca Zamora pisa los terrenos pantanosos de las prácticas clientelares y chambistas de la clase política para asignar nombramientos.


Fallo contra el Ichitaip: golpe a la simulación

La Crónica de Chihuahua
Enero de 2014, 13:48 pm

Por: Alejandro Salmón Aguilera

El fallo emitido por el juez 8º de Distrito tiene muchos más alcances que el beneficiar al abogado Rodolfo Leyva Martínez, promotor del amparo en contra de la designación de dos consejeras del ICHITAIP. El fallo del juez Ignacio Cuenca Zamora pisará terrenos pantanosos que van a dar las prácticas clientelares y chambistas en las que incurre la clase política para asignar nombramientos en organismos descentralizados o autónomos.

A saber, Leyva Martínez promovió un recurso en contra del Congreso del Estado por la forma como designó a Alma Rosa Armendáriz y a María Nancy Martínez Cuevas como consejeras del Instituto Chihuahuense de Transparencia y Acceso a la Información Pública, el Ichitaip.

En su alegato, el promoviente arguyó que el Congreso del Estado no explicó en ningún momento por qué eligió precisamente a esas dos aspirantes de entre los más de 50 que se presentaron a contender por esos cargos que estaban vacantes.

Peor aún: no se le ha dado una explicación del por qué él no fue considerado, pese a que tuvo la más alta calificación entre las personas que aplicaron examen para ocupar uno de esos dos cargos, mientras que las designadas tuvieron—según el mismo fallo del tribunal de distrito—calificaciones por debajo de 7; incluso, a Alma Rosa Armendáriz la han señalado como “reprobada”, pues no alcanzó ni el 50 por ciento de los aciertos en el examen de oposición.

El fallo no es definitivo, pues el Congreso aún tiene a la mano un recurso de revisión ante el mismo juez 8º, o bien, que el caso llegue hasta un Tribunal Colegiado, si no es que a la mismísima Suprema Corte de Justicia de la Nación.

Es decir, que a estas alturas, no se trata de si las dos consejeras son destituidas o si Rodolfo Leyva queda como consejero. De lo que se trata es que el Poder Judicial Federal ya emitió un fallo judicial que sanciona la forma como el Congreso del Estado, asigna los cargos, con un evidente componte político, de arreglos y “planchadurías”, ya no entre partidos, sino entre gurpúscilos internos hacia el interior de éstos.

El alegato de Rodolfo Leyva no es nuevo, pero sí es la primera vez que un juez le da la razón a quien pide que el Congreso del Estado motive y explique por qué nomina a una persona para cargos públicos designados por elección legislativa.

En el caso del Ichitaip, de los consejeros del Instituto Estatal Electoral, el Congreso recurre a la figura de la convocatoria pública y luego—se supone—elige de entre los aspirantes que se hayan registrado para el cargo.

En el mejor de los casos, se trata de una crueldad política y hasta social, al convocar a la sociedad en general a participar en un concurso donde ya hay ganadores desde antes del inicio de la contienda. En el peor de los casos, es una práctica de simulación que deja en claro la inexistencia de los supuestos “órganos ciudadanos”. El verdadero alcance del fallo del juez 8º de Distrito es ese: dejar al desnudo la simulación.