Estación Carrillo: La sal que brota del desierto

**En pleno desierto, ejidatarios cosechan sal usando agua en parcelas que, al quedar secas por la evaporación, dejan el producto expuesto al aire, y se recoge entonces.


Estación Carrillo: La sal que brota del desierto

La Crónica de Chihuahua
Enero de 2014, 08:48 am

Jiménez, Chih.- En el desierto de Chihuahua, haciendo frontera con el estado de Durango, se localiza un pequeño poblado llamado Estación Carrillo, en Jiménez. Ahí hay un salar, muy cerca de un sitio llamado Laguna de las Palomas… un lugar que no es laguna y sí un salar en medio del desierto. Una zona donde sus habitantes se dedican a aprovechar un muy antiguo mar, construyendo enormes tinas, inundándolas con agua, produciendo una salmuera, dejando que se evapore al sol y cosechando sal.

La sal se puede obtener mediante diferentes medios, algunos requieren de separar el agua del mineral, como el método por evaporación de una salmuera, lo que ocurre por lo general en las zonas costeras. Otro método es la pulverización de un mineral (halita), esto se hace con técnicas mineras, aprovechando depósitos muy antiguos.

El método de cosecha del salar en el desierto de Chihuahua es considerado recolección, y antecede a la agricultura. Durante la temporada de lluvias se inundaba algunos terrenos de antiguos lagos y mares; se saturaba el suelo; el agua comenzaba a evaporarse y ello permitía que la sal saliera a la superficie desde el subsuelo; una vez que sucedía esto, se recogía. Esta manera de trabajar data de la época del Neolítico.

Con este método se obtienen rocas de sal, que son clasificadas por calidades y vendidas a los intermediarios, quienes las llevan a las industrias consumidoras o donde refinan la sal.

La sal que tienes en tu casa ha pasado por un proceso de refinamiento y blanqueo, en donde el agua juega un papel muy importante. Primero las rocas son trituradas, lavadas y nuevamente hidratadas; en este punto te puedes dar cuenta de cómo se evaporó el agua, pues si en tu salero hay pequeños cristales cúbicos de un mismo tamaño, es que el proceso de evaporación fue rápido; pero si los cristales de sal tienen formas triangulares, entonces el proceso de evaporación fue lento.

Como puedes darte cuenta, el agua y sus propiedades juegan un papel muy importante para que podamos tener acceso a este delicioso condimento.

Salinas

En la salina de la Laguna de las Palomas, el trabajo de extraer la sal es muy parecido a la que se hace con el agua del mar, esto es, mediante evaporación. El agua se conduce hasta unas tinas construidas, llamadas charcas, que son inundadas. A diferencia del mar, donde el agua es salada, aquí el suelo es salado, el subsuelo está lleno de sal disuelta y el agua se usa para sacarla a la superficie; las charcas se convierten en áreas de evaporización del agua o salmuera (agua salada) al sol y al aire. Las charcas son parcelas divididas en surcos rectangulares, llamadas melgas, que son trabajadas por sus dueños. Las melgas tienen una profundidad que va de los 15 a los 20 centímetros. La evaporación natural de la salmuera la va concentrando hasta que la sal se va al fondo del suelo (no del subsuelo) en forma de grandes cristales, ya lista para su recolección con palas y carretillas, lo que ellos llaman carruche.

En cada inundación se puede cosechar tres veces: en la primera, cada charca produce alrededor de 300 toneladas de sal; la segunda cosecha produce sal de segunda calidad y sólo 150 toneladas; y la tercera es sal de baja calidad y en menor cantidad.