Espera 19 horas en la playa, hasta que el mar le regresa a su hijo

CRÓNICA

La Crónica de Chihuahua
Agosto de 2013, 11:31 am

Juárez.- "Estoy en la playa esperando a ver quién me ayuda a encontrar a mi hijo en el mar".

Esas fueron las palabras que vía telefónica Nidia expresó ayer a las 6 de la mañana a su comadre Diana Camacho.

"Nunca se movió de la playa desde que Alan fue devorado por el mar", narró ayer Diana.

Procedentes de Guadalajara, los juarenses Nidia Griselda Torres Gómez y Alan Giovanni Garibay Torres, madre e hijo, llegaron el pasado miércoles por la mañana al Puerto de San Blas, en Nayarit, para vacacionar.

Alan retornará a Juárez este viernes en un ataúd después de fallecer ahogado en las playas de ese polo turístico y pesquero.

Tras 19 horas de búsqueda, alrededor de las 10:00 horas de ayer fue localizado el cadáver del adolescente de 14 años, quien se ahogó la tarde del miércoles cuando una ola lo arrastró a mar abierto.

El rastreo fue encabezado por Nidia Griselda, quien incluso pernoctó en la playa a la orilla del oleaje, justo enfrente de donde desapareció su hijo; en espera de que la resaca llevara su cadáver a la arena.

Esto no ocurrió.

Según el relato de los familiares, Nidia y Alan se metieron al mar desde el mediodía del miércoles, pero alrededor de las 14:00 horas, una ola los arrastró a ambos hacia mar adentro.

Fueron instantes de angustia.

Nidia tomó de la mano a su hijo para evitar que se hundiera pues ninguno de los dos sabía nadar, pero el continuo oleaje se lo arrebató de las manos.

La mujer comenzó a gritar y un salvavidas escuchó sus gritos que se mezclaban con otras exclamaciones de alarma de los demás bañistas.

Ella fue alcanzada por el rescatista que la puso fuera de peligro, pero cuando el salvavidas retornó al agua por Alan, ya no pudo localizarlo entre el oleaje.

Nidia comenzó a pedir ayuda para iniciar una búsqueda rápida de su hijo, pero según refieren sus familiares, ni la policía en San Blas ni el personal de Protección Civil, que por cierto se alcoholizaba en una playa aledaña al accidente, le prestaron auxilio.

Los de Protección Civil, además de la fiesta en la que departían, argumentaron que estaban en huelga.

Minutos después, Nidia comenzó a pedir ayuda a los pobladores, bañistas y pescadores.

“Quienes la ayudaron fueron los lancheros, que suspendieron la búsqueda a las 6:30 de la tarde, cuando ya casi oscurecía. Desde esa hora mi sobrina se quedó en la playa albergando la esperanza de que su hijo fuera retornado por el mar, hasta que lo encontraron hace una hora”, reveló ayer por la mañana Juana Camacho, tía de Nidia Griselda.

Tras el hallazgo del cuerpo, la madre del adolescente fue hospitalizada en una clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social en San Blas, víctima de un choque nervioso. Fue dada de alta horas después, pero sedada.

Para entonces ya era auxiliada por su hermano Daniel Torres Gómez, quien hizo el viaje desde esta frontera por aire a Guadalajara, de ahí por tierra hasta la playa de San Blas donde arribó a las 3:00 de la madrugada de ayer para encontrar a su hermana sobre la arena esperando encontrar a su sobrino.

Alan Garibay Torres y su madre Nidia Torres, de 35 años de edad, radican en la colonia Mariano Escobedo, en el cruce de las calles Juan Mata Ortiz y Mamulique.

En su vivienda estaban ayer casi todos sus familiares, quienes gestionaron ante el gobierno estatal primero que solicitaran ayuda a la Secretaría de Marina para el rastreo del cadáver de Alan, y después de encontrarlo, para el traslado del cuerpo hasta esta frontera.

En esta solicitud de auxilio intercedieron la Subsecretaría de Gobierno y la Secretaría estatal de Desarrollo Social, que coordinarán los servicios funerarios para el traslado del cuerpo hasta Juárez.

Se espera que el cadáver de Alan Giovanni Garibay Torres arribe a esta frontera este viernes por la mañana. recibirá un servicio fúnebre en una funeraria, y el próximo sábado serán depositados sus restos en una cripta familiar en el Panteón Tepeyac.

Alan Giovanni egresó en julio pasado de la Escuela Secundaria Técnica 1.

Tras vacacionar con su madre en Guadalajara y San Blas, se alistaba para iniciar clases el próximo lunes en el Instituto Politécnico de Enfermería, donde cursaría una carrera técnica.

Nidia Griselda es cajera en una casa de empeño. (Antonio Rebolledo/El Diario)