Entró y salió siete veces de la cárcel asesino de abogados

**Esto confirma que la "puerta giratoria" no ha desaparecido del todo


Entró y salió siete veces de la cárcel asesino de abogados

La Crónica de Chihuahua
Mayo de 2014, 21:00 pm

Ciudad Juárez.- El presunto asesino de los abogados Salvador Urbina Quiroz y César Cordero Gutiérrez, identificado como Oscar Adrián Martínez Martínez, entró y salió del Cereso de Ciudad Juárez al menos siete veces desde el 2009 por los delitos de robo, posesión de armas, drogas y hasta acusado de homicidio, de acuerdo con información oficial.

Esta situación se registró debido a que el inculpado recibió tanto de jueces de Garantía (estatal) como de Distrito (federal) sentencias con los beneficios de la libertad condicional, la sustitución de la pena por jornadas de trabajo a favor de la comunidad y el pago de fianzas, lo que permitió que recobrara su libertad.

En otras ocasiones los ministerios públicos tanto estatales como federales no pudieron aportar elementos para que fuera encarcelado, de acuerdo con reportes periodísticos basados en informes de la Policía Municipal, Estatal, Federal y la PGR.

Su caso incluso fue exhibido en enero de 2011 por El Diario, en el reportaje “Multihomicida en libertad pone en evidencia las fallas en el sistema de justicia penal”, donde se detallaban las actividades delictivas de Martínez Martínez y cómo burló la ley, donde representantes de diversos sectores, entre ellos el abogado Urbina, cuestionaban esta situación.

En ese entonces el jurista, como presidente del Consejo de Vigilancia de la Confederación de Colegios de Abogados de México, declaró que este tipo de casos de reincidencia se presentan porque el sistema creado por la anterior administración estatal era erróneo y fue diseñado de manera incorrecta.

Esto nos demuestra una vez más la necesidad de reformar y entrar a un estudio a fondo en el que participen todos para hacer el análisis de las fallas del sistema penal, porque sostengo que las fallas principales son la falta de un investigación técnica y científica, la falta de la integración de los expedientes”, afirmó entonces el abogado Urbina.

El ahora acusado del homicidio de Urbina y Cordero, quien también se hace llamar Oscar Adrián Batres Martínez, tiene un largo historial criminal.

De acuerdo con los archivos de la Fiscalía Especializada en Ejecución de Penas y Medidas Judiciales, su primer ingreso al centro carcelario fue 19 de febrero de 2009 acusado del delito de portación de arma de fuego sin licencia, pero al día siguiente obtuvo su libertad al dictarse un auto de libertad por falta de pruebas.

La segunda entrada al reclusorio fue el 16 de septiembre de 2009. En esta ocasión enfrentaba cargos por robo.

Por ese delito, el 9 de noviembre de ese mismo año a través de un procedimiento abreviado –una herramienta prevista por el sistema penal para acelerar la finalización de los procesos- el entonces juez de Garantía Guillermo Gómez Cortes lo sentenció a dos años prisión dos años y el pago de una multa de mil 644 pesos, con derecho a la libertad condicional.

En esa fecha, físicamente Oscar Adrián no salió libre pues estaba a disposición de otro Tribunal de Garantía por un robo calificado y el primero de marzo del 2010, otra vez en procedimiento abreviado le fue dictada una condena de un año y cuatro meses de prisión, el pago de mil 96 pesos y se le concedió el disfrute inmediato del beneficio de la condena condicional, es decir, quedar en libertad inmediata.

En julio del 2010, la Policía Federal informó que detuvo a tres participantes de una balacera en El Granjero, entre ellos a Óscar Adrián Martínez Martínez, “El Grande”, quien ya había sido detenido por agentes de esa misma corporación y hasta fue trasladado al Distrito Federal a disposición de la entonces

Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (Siedo), pero después de un proceso fue liberado.

El 14 de septiembre de 2010, volvió a ingresar al penal por un robo en grado de tentativa y tan solo cuatro días después se dictó un auto de no vinculación a proceso.

En este ingreso además del fuero común, Oscar Adrián fue consignado al fuero a un Juzgado de Distrito por el arma que portaba al momento de intento de robo, es decir, se le acusó del delito de portación de arma de fuego de uso exclusivo del Ejército. Sin embargo, el 20 de septiembre se ordenó su inmediata libertad por haberse acogido al beneficio de la libertad bajo caución o depósito de una fianza.

Estando en libertad por lo que se refiere a este último proceso, el 29 de noviembre de 2010 un juez federal emitió una sentencia condenatoria en su contra, consistente en tres años y diez meses de cárcel así como el pago de una multa de tres mil 907 pesos y se le concedió el beneficio de la sustitución de la pena por jornadas de trabajo a favor de la comunidad y nuevamente la condena condicional.

La siguiente entrada al Centro de Readaptación Social para Adultos fue el 8 de enero de 2011 ahora por su posible responsabilidad en la comisión de más delitos: posesión de mariguana, portación de arma de fuego sin licencia y posesión de cartuchos para armas de fuego de uso exclusivo del Ejército.

Sin embargo, al día siguiente de haber sido encarcelado, salió nuevamente libre al depositar una fianza.

Otra reclusión fue el 16 de septiembre de ese mismo año al ejecutarse una orden de reaprehensión en su contra al detectarse que estaba incumpliendo con la primera sentencia, emitida el 9 de noviembre de 2009.

El 25 de julio del año pasado volvió a ser arrestado, por un robo agravado a una gasera.

En esa ocasión informó personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) identificó a Martínez como un agente activo de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM), pero esto no fue confirmado en aquella ocasión y ayer fue desmentido por el actual titular de la Policía Municipal, César Muñoz Morales.

El funcionario dijo ayer que se trata de un homónimo y que en los archivos del departamento de Recursos Humanos existe el antecedente de una persona que lleva su mismo nombre y su edad es similar, pero no es él.

El 3 de octubre, por el asalto a una gasera, la entonces juez de Garantía Aída Vázquez Arreola lo sentenció mediante un procedimiento abreviado a un año y seis meses de cárcel, el pago de una multa consistente en mil 942 pesos y la entrega de 400 pesos como reparación del daño, además le concedió el beneficio de condena condicional.

Ocho días después, el 11 de octubre de 2013, el sentenciado pagó la reparación del daño a la compañía que atracó y volvió a gozar de libertad.

En uno de los últimos periodos que Martínez estuvo preso, el 22 de agosto de 2013 se ejecutó otra orden de aprehensión en su contra por el delito de portación de arma de fuego sin licencia.

Sin embargo, el presunto homicida volvió a burlar el sistema pues el 24 de septiembre siguiente le fue dictada una sentencia de dos años de cárcel y el pago de una multa de tres mil 238 pesos con derecho a la sustitución de la pena de prisión por tratamiento en libertad. Por lo que el 10 de octubre obtuvo la libertad también en el fuero federal.

Los datos de la Fiscalía de Ejecución de Penas y Medidas Judiciales evidencian que los jueces de Garantía que sentenciaron a Oscar Adrián Martínez Martínez y/o Batres Martínez no observaron lo dispuesto en el Artículo 86 del Código Penal del Estado de Chihuahua al momento de otorgarle la condena condicional, pues en la II fracción de este ordenamiento se establece que uno de los requisitos para que una persona reciba este beneficio es que “no haya cometido delito doloso en los seis años anteriores a los hechos por los cuales se le juzga”.

Mientras que los jueces federales para otorgar el derecho de la libertad condicional toman en cuenta que la pena impuesta no exceda los cinco años de prisión y queda a criterio de ellos el determinar si toman en cuenta las sentencias emitidas en contra del procesado.
El Diario