En El Reliz, resultó que nadie hizo ningún “rescate ecológico”

*Las mentiras se revelaron solitas y el tiempo puso a cada quien en su lugar. **Lo que hay, son fraccionamientos privados.


En El Reliz, resultó que nadie hizo ningún “rescate ecológico”

La Crónica de Chihuahua
Mayo de 2011, 20:43 pm

Por Froilán Meza Rivera

Chihuahua, Chih.- ¿Se acuerda el lector de la crisis del Reliz? ¿Recuerda haber escuchado o leído palabras altisonantes en medio de declaraciones de funcionarios que se llenaban la boca con la “defensa” de la “ecología”? A más de nueve años de la crisis de El Reliz, hoy en día, algunos de los colonos originales continúan gozando de la posesión de sus terrenos, y para ellos, el “rescate ecológico” que esgrimió el gobierno para quedarse con sus tierras, terminó revelándose como una gran mentira.

“Fíjese nomás si no era mentira”, dijo Vicente Herrera Fernández, uno de aquellos rebeldes que se mantuvieron firmes hasta el final.

El hombre apuntó desde su patio hacia los cuatro puntos cardinales, para mostrar la proliferación de fraccionamientos privados en la zona, y la ausencia total de obras de rescate ecológico.

Atrás quedaron los días de confrontación, cuando hasta acá venían policías judiciales a amedrentar a los colonos rebeldes, con tal de que vendieran su tierra y abrieran paso a los planes del gobierno.

“Fíjese nomás, y dígame si ve usted alguna acción de rescate ecológico por aquí... no hay nada de eso, pero lo que sí sabemos es que el entonces gobernador y el entonces presidente municipal, lo que querían era dar la tierra a los fraccionadores”, aseveró.

A 11 CENTAVOS EL METRO

En noviembre del 2001, con una decisión que provocó la inmediata protesta de los afectados, el gobernador del estado acordó la expropiación de 75 hectáreas de terrenos del Ejido Labor de Terrazas, a un precio promedio de 11.1 centavos. Los habitantes del lugar señalaron que, muy cerca de aquí, existían fraccionamientos donde el valor de un metro cuadrado de terreno se cotizaba hasta en 3 mil 500 pesos.

El Gobierno del Estado expuso, entre los motivos de la expropiación, que pretendía “preservar y cuidar que no sean contaminados o deteriorados los cuerpos de agua como la presa El Rejón y Chuvíscar, por lo que se hace necesario impulsar la reforestación y construcción de áreas verdes con eminente visión ecológica”. Firmaron el documento Patricio Martínez García, y el secretario de Gobierno, Sergio Martínez Garza.

En mayo del 2002: El gobierno regaló 50 hectáreas en El Reliz a la empresa que administra la Universidad La Salle, para construir su campus.

El 25 de marzo del 2003, seguía el discurso “ecologista” y “conservacionista”: En la zona de El Reliz se construirá un parque ecoturístico y familiar, donde serán sembrados cientos de árboles y se buscará convertir el lugar en un vergel para beneficio de los chihuahuenses, dijeron los directores de Obras Públicas y de Ecología del Municipio, Luis Fernández Casillas y Roberto Chaires Almanza, quienes señalaron que también se rescatarán y rehabilitarán los vestigios del Acueducto Colonial.

El 15 de junio del 2003, el secretario de Desarrollo Urbano y Ecología del Gobierno del Estado, Roberto Cano Hermosillo, habló por primera vez de que las reservas territoriales de La Haciendita y Labor de Terrazas, en la zona de El Reliz, serían entregadas al Municipio para desarrollos habitacionales.

Y de ahí p’al real, los hechos dieron la razón a los colonos.