El muro dejó a México sin su única manada salvaje de bisontes

**Los bisontes que solían rutinariamente echar abajo el cerco fronterizo de púas, han quedado ahora aislados en Estados Unidos por esta barrera infranqueable entre el condado de Hidalgo en Nuevo México y el municipio de Janos, en Chihuahua.


El muro dejó a México sin su única manada salvaje de bisontes

La Crónica de Chihuahua
Octubre de 2018, 12:06 pm

Fuente: investigacionyciencia.es

La frontera entre el municipio de Janos en Chihuahua, México, y el condado de Hidalgo en Nuevo México, Estados Unidos, es imperceptible a la distancia —los pastizales, que son la vegetación natural, se extienden por decenas de kilómetros, como interminables en el horizonte. Desde tiempos inmemorables, esta región se había mantenido así, sin barreras entre los dos países, permitiendo un flujo natural de la fauna y flora silvestres. Lo único que separaba a la frontera entre ambos países era una cerca de alambre de púas, que no representaba una barrera para la vida silvestre.

Sin embargo, en el año 2006, esto cambió. El Gobierno de los Estados Unidos construyó una barrera enorme para proteger su frontera con México, con estructuras de acero como si fueran matatenas gigantes. Los bisontes que solían rutinariamente echar abajo el cerco fronterizo de púas, han quedado ahora aislados en Estados Unidos por esta barrera infranqueable. También han quedado aislados berrendos, pumas, pecaríes y muchas otras especies de animales.

La propuesta de Donald Trump, respecto a construir un muro en la frontera entre ambas naciones es, además de estúpida, ignorante, debido a que ya existe parte de ese muro.

En realidad, el muro fronterizo entre los dos países ya se extiende a lo largo de más de 1000 kilómetros, con diferentes tipos de cercas y estructuras. La migración y los movimientos de más de 800 especies de fauna y flora, de los vertebrados, principalmente mamíferos, reptiles y anfibios han sido afectados. La construcción del muro se ha hecho en flagrante violación de acuerdos internacionales ambientales y por lo tanto, viola la soberanía de México.

Los impactos que tiene el muro son, además de ambientales, sociales y económicos. Los impactos ambientales tienen que ver con el movimiento de especies que tienen las poblaciones entre ambos países, para los que el muro se convierte en una barrera infranqueable. Especies en peligro de extinción como el berrendo sonorense, los castores y los ocelotes, requieren de estos movimientos para mantener sus poblaciones saludables. Hay que recordar que las poblaciones numéricamente más pequeñas son más susceptibles a la extinción. A una escala mayor, el muro impacta los servicios ambientales, que son los beneficios que obtenemos los seres humanos de la naturaleza. Por ejemplo, la calidad y cantidad de agua, la calidad de aire y la fertilización de los suelos. En este sentido, el muro ya ha provocado cambios en el flujo de arroyo y ríos, infiltración del agua, y otros problemas que afectan a la población ambos países.

Mi grupo de trabajo y otros investigadores hemos determinado que más de 800 especies están siendo afectadas por el muro, lo que empeorará si la totalidad del muro se construye. Cualquier país puede proteger su soberanía de la manera que considere adecuada, pero considerando un par de cosas: el respeto a la soberanía de otras naciones y a los acuerdos internacionales, en este caso, en materia ambiental. Levantar el muro sin consultar a México y sin evaluar los impactos ambientales generados por su construcción ha sido una flagrante violación a estos tratados. Lamentablemente el gobierno mexicano no ha hecho un reclamo lo suficientemente severo ante el tamaño de la amenaza.