Ejecutaron al mexicano Edgar Tamayo en Texas

**El mexicano que estuvo en el corredor de la muerte desde 1994 murió este miércoles a las 9:32 p.m. hora local.


Ejecutaron al mexicano Edgar Tamayo en Texas

La Crónica de Chihuahua
Enero de 2014, 22:09 pm

Tamayo no pidió ningún menú especial y comió los platillos que estaban disponibles en la prisión: costillas de puerco, arroz, verduras, maíz, café y té.

Huntsville, Texas.- Pese a que las negociaciones diplomáticas y manifestaciones que buscaban evitar la ejecución de Edgar Tamayo Arias, el mexicano no pudo evitar la cámara de la muerte.

“Pidió a sus familiares que mantuvieran la calma y estuvieran tranquilos”

Tamayo fue ejecutado con una inyección de barbitúrico de acción rápida en la cárcel de Huntsville. A las 9.32 pm, hora local en Texas, fue declarado muerto.

Tamayo, según testigos de la ejecución, se negó a decir unas últimas palabras antes de la inyección letal que acabó con su vida.

La ejecución de Tamayo, condenado a muerte por el asesinato de un policía estadounidense en 1994, se produjo con más de tres horas de retraso sobre el horario previsto (6 pm), debido a la presentación de un recurso de última hora que fue rechazado por la Corte Suprema de EEUU.

A pedido del mexicano, ningún familiar suyo presenció sus últimos momentos, a los que sí asistieron diversos parientes del agente asesinado, Guy Gaddis, entre ellos la madre y otros familiares cercanos.

En las horas previas a la ejecución, Tamayo había confesado que estaba "listo" para morir y que veinte años en el corredor de la muerte eran "demasiados", según dijeron fuentes penitenciarias."Estoy listo para irme. Veinte años son demasiados", confesó Tamayo, según explicó el portavoz del Departamento de Justicia Penal de Texas, Jason Clark.
Sus padres lo habían visitado por la mañana y las últimas dos horas de visitas sus dos hijas también se despidieron de él.

Tamayo luego fue trasladado a la Unidad Carcelaria Walls en la comunidad de Huntsville donde se ubica la cámara de la muerte. El traslado de 65 kilómetros (casi 41 millas) se realizó bajo fuertes medidas de seguridad.

El condenado había probado su última comida horas antes, a las 2 pm. No pidió ningún menú especial y comió los platillos que estaban disponibles en la prisión: costillas de cerdo, arroz, verduras, maíz, café y té.

Jason Clark había explicado que, en las horas previas a la ejecución, Tamayo tuvo la oportunidad de tomarse fotos junto a su padre y sus hijas, a los que pidió "que mantuvieran la calma y estuvieran tranquilos".

El caso de Tamayo generó fuertes reacciones en México, donde se realizaron importantes campañas y marchas masicas para intentar detener su ejecución. Casi 30 mil personas firmaron una petción de Amnistía Internacional y Human Rights Watch calificó la pena como una "barbarie".

El final

La Corte Suprema de Justicia se negó hoy a escuchar el caso de Tamayo, luego de que los abogados del preso presentaran un recurso de último momento tratando de frenar la ejecución.

La defensa de Tamayo había presentado "nuevos argumentos" ante la Corte Suprema pero el tribunal rechazó el recurso de última hora y ordenó que la ejecución continuase su curso.

Horas antes, la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito, con sede en Nueva Orleans, tambien había rechazado las presentaciones de los abogados, argumentando que los recursos presentados el pasado día 20 (ser ciudadano extranjero en EEUU y su leve discapacidad intelectual), llegaron demasiado tarde para ser analizados, por lo que "denegaron la moción".

Tamayo fue condenado por el asesinato en 1994 de un agente policial en Houston, Texas. El mexicano disparó contra el oficial cuando era trasladado esposado a la cárcel, tras ser detenido por asalto, y después se escapó por una ventana de la unidad. A las 9.32 pm de hoy, pagó con su vida.

Las cinco claves del caso Tamayo

El caso generó miles de reacciones contrarias a la ejecución y ha tensado de nuevo las relaciones entre México y Estados Unidos, lo que confiere al ’caso Tamayo’ un carácter excepcional. Estas son sus cinco claves:

1. El derecho a contactar con el consulado mexicano no se aplicó. Tamayo, como ciudadano de nacionalidad mexicana, nunca fue informado de su derecho a contar con la ayuda legal de representantes del consulado de su país, según denuncia tanto su defensa como las autoridades de México.

2. El condenado sufre una discapacidad mental. Durante su proceso judicial, el abogado de oficio no argumentó ninguna discapacidad mental ni pidió las pruebas de coeficiente intelectual para el procesado. En 2008, un psicólogo diagnosticó a Tamayo una "discapacidad mental leve" que certificó una deficiencia mental y un daño cerebral que el mexicano sufre desde su adolescencia tras un accidente en un rodeo. En 2002, el Tribunal Supremo de Estados Unidos prohibió la ejecución de reos con discapacidad mental.

3. El Estado de Texas desoye las peticiones. La defensa del mexicano acusa específicamente a la Junta de Perdones de Texas, encargada de las revisiones de estos casos, de negarse a dar acceso a los argumentos y las evidencias en los que el fiscal explica por qué se opone a la clemencia de Tamayo.

4. Instituciones, entidades y ciudadanos pidieron la revisión. Amnistía Internacional presentó el pasado 14 de enero 17,500 firmas contra la ejecución de Tamayo, recogidas en 57 países, principalmente en México, España, Estados Unidos, Chile y Argentina.

5. La defensa admite la gravedad del asesinato. No se trata de una voluntad de absolver al condenado o negar su crimen, lo que pide la defensa a la Junta es una suspensión de 150 días de la ejecución o la conmutación de la sentencia de muerte por cadena perpetua.