Disney compra Lucasfilm

La compañía adquiere el imperio de George Lucas por 3.125 millones de euros Anuncia una nueva entrega de 'La guerra de las galaxias'


Disney compra Lucasfilm

La Crónica de Chihuahua
Octubre de 2012, 20:16 pm

El ratón Mickey se ha convertido en el último y más poderoso de los caballeros Jedi con la compra de Lucasfilm, la fábrica de sueños de uno de los grandes Midas de la historia del cine, George Lucas. La multinacional Disney ha hecho temblar los cimientos de la industria al anunciar la adquisición por el módico precio de 3.125 millones de euros. Una transacción comercial que, además de la inmortal saga de La guerra de las galaxias (la más taquillera de la Historia), incluye el resto de las franquicias y negocios de los estudios que creó George Lucas en 1971.

La noticia ha servido de auténtica bomba de relojería para los millones de incondicionales de Star Wars en todo el mundo: Disney anunció nuevas —al menos tres— entregas del incansable combate entre los caballeros Jedi y el Lado Oscuro. La primera de ellas llegará a los cines en 2015. Bob Iger, presidente de Disney, ha confirmado, en una llamada telefónica a sus inversores, que esta séptima entrega (de la que ya hay un tratamiento o borrador escrito) se verá seguida de una octava y de una novena, completando así los nueve episodios a los que Lucas hizo alusión en más de una ocasión cuando puso los cimientos de su magistral criatura de ciencia-ficción. El estreno llegará de forma escalonada cada dos o tres años.

El visionario realizador, guionista y productor George Lucas posee el 100% de Lucasfilm, compañía de la que era su único presidente hasta la fecha. “Lucasfilm refleja la extraordinaria pasión, visión y capacidad narrativa de su fundador” fue el halago pronunciado por Bob Iger, presidente de los estudios Disney. “La compra combina una cartera mundial de contenidos que incluye La guerra de las galaxias, una de las mejores franquicias dirigidas a la familia de todos los tiempos, con la creatividad sin igual en todas las plataformas y mercados de Disney para generar un crecimiento sostenido y a largo plazo”, ha añadido.

El anuncio ha pillado a la industria por sorpresa, aunque sigue la reciente política de los estudios Disney de aumentar su mercado adquiriendo los principales sellos relacionados con la industria del espectáculo dirigido a las familias como principal audiencia. Una política que Iger puso en marcha con la compra de los estudios Pixar y que aumentó con la adquisición de los estudios Marvel.

En el caso de Lucas, el realizador de American Graffiti siempre fue una figura peculiar de Hollywood, cambiando el lenguaje cinematográfico cuando apostó por llevar el género de aventuras al espacio, algo inusual hasta la llegada de la primera entrega (la cuarta en la saga) de La guerra de las galaxias. Peculiar también a la hora de hacer negocios, dado que, contra todo pronóstico, Lucas consiguió retener en su poder todos los multimillonarios derechos del merchandising o productos derivados de sus películas, mientras los estudios Fox se encargaban únicamente de la distribución de sus filmes.

Sin embargo, últimamente Lucas había dejado claro su deseo de pasar a un segundo plano en la compañía con sede en San Francisco, como demostró cuando contrató a la productora y amiga Kathleen Kennedy para dirigir la empresa. La compra hecha pública ayer convierte a Kennedy en la presidenta de Lucasfilm, con Lucas como consejero creativo. El mago de California ha manifestado su intención de dedicarse ahora “a la filantropía y al cine experimental”. “Durante los últimos 35 años uno de mis mayores placeres fue ver cómo La guerra de las galaxias pasaba de una generación a otra”, ha indicado Lucas con un adiós también a la realización de nuevos episodios. “Es el momento de pasar mi saga a otra generación de realizadores”, ha puntualizado, y zanjado: “Siempre creí que La guerra de las galaxias me sobrevivirá en el tiempo”.

Lucasfilm y los estudios Disney ya habían colaborado con anterioridad con la creación de Star Tours, una de las atracciones más populares de Disneylandia y del resto de los parques de atracciones de los estudios Disney basada en la misma saga espacial.

La compra incluye no sólo la saga sino sus beneficios en los productos derivados además de en el campo de la animación, efectos especiales y postproducción. A lo largo de los años el interés de George Lucas se centró en el desarrollo de nuevas tecnologías, que aplicó a sus películas y que compartió con otros estudios, distribuidores y exhibidores bajo el sello de Lucasfilm o bajo alguno de sus otros nombres como LucasArts, Industrial Light & Magic o Skywalker Sound.

Los firmantes del acuerdo

La compañía Walt Disney, fundada en 1923 por el director animador y guionista del que recibe el nombre, comenzó siendo un estudio de Hollywood. Sobre las películas de animación de Disney (títulos como Dumbo o Fantasía, y personajes icónicos de la cultura popular del siglo XX, el ratón Mickey o Bambi), Disney construyó un imperio que hoy en día cuenta con decenas de filiales que operan en cinco segmentos de negocio: medios de comunicación, parques y complejos de ocio, medios interactivos y productos de consumo. Sus ingresos en 2011 ascendieron a 30.800 millones de euros.