Día internacional de la mujer: desdén oficial y enojo social

**Desdén, impunidad y doble victimización. Con eso se puede ir de Chihuahua el Día Internacional de la Mujer.


Día internacional de la mujer: desdén oficial y enojo social

La Crónica de Chihuahua
Marzo de 2014, 10:28 am

Por: Alejandro Salmón Aguilera

En memoria de Irma Campos Madrigal y de Diana Álvarez Ramírez

Este sábado 8 de marzo, todo el mundo conmemora el Día Internacional de la Mujer…excepto los tres poderes del estado de Chihuahua.

Pese a que la fecha “cayó” en sábado, día de asueto regular para la burocracia de todo estrato, y de que no existe ningún otro acto oficial programado, los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial de Chihuahua decidieron dejar para otro día.
Es decir, que le ganó la desidia a la conmemoración de un día que le debería doler en particular a una entidad cuya fama mundial se la debe, de forma justificada o no, a la violencia de género y a la cantidad de homicidios contra mujeres que aún están impunes.

El desdén oficial hacia una conmemoración que recuerda, en particular, la lucha de las mujeres por el derecho a una vida sin violencia, cobra una especial relevancia en un momento en el cual el estado se encuentra una vez ante un rebrote de los casos de homicidios en perjuicio de mujeres.

El caso más reciente—quisiéramos decir que el último—, el de Esperanza Manuela Chaparro Sáenz, ha vuelto a remover las entrañas del sistema de procuración de justicia, no sólo por la barbarie que sufrió antes de ser asesinada, sino por la que recibió después de su lamentable muerte. Las infortunadas declaraciones del fiscal General del Estado, Jorge González Nicolás, en el sentido de que la joven podría haber incurrido en una autoagresión o suicidio, no sólo lastimó a la familia de la joven victimada, sino que ha generado una reacción social tan virulenta que ha regenerado el penoso estigma de que en Chihuahua se puede matar a una mujer y no pasa nada.
El caso de Esperanza acentuó la alerta en torno al rebrote de la violencia de género, pues sucedió apenas dos semanas después de que la jovencita Lizeth Berenice Chavira Arena fuera asesinada en condiciones similares.

Ni el gobernador, ni el recién electo presidente del Supremo Tribunal de Justicia, ni el pleno de los diputados del Congreso del Estado han presentado una postura al respecto. La única postura oficial que conocemos hasta ahora es la penosa versión del fiscal González Nicolás y la supuesta carta que insinuaba el suicidio, la cual no ha sido exhibida. Vaya, ni siquiera una disculpa pública ha presentado el fiscal.

Así conmemoran las autoridades de Chihuahua el Día internacional de la mujer: con un desdén a la fecha misma; a las familias de las víctimas y hasta a las mujeres que se hicieron merecedoras de un galardón por su encomiable trabajo en diversos ámbitos de la actividad social, la academia, las artes y la investigación.

Así se festeja, con un intento de denostar a las víctimas y ahora, además, con una campaña deplorable en contra de la poeta Gabriela Borunda por “atreverse” a rechazar el premio que le otorgaría el Congreso del Estado como mujer distinguida en el ámbito de la literatura.

Desdén, impunidad y doble victimización. Con eso se puede ir de Chihuahua el Día Internacional de la Mujer.