Denuncia relatora ante la ONU violencia contra trabajadoras

**Los señalamientos y demandas penales no han tenido eco al interior de las instituciones, y por el contrario derivaron en más agresiones

La Crónica de Chihuahua
Julio de 2014, 09:20 am

Ciudad de México.- Si el Estado mexicano actuara, con la debida diligencia en la prevención, atención, erradicación y sanción de la violencia contra las mujeres, las denuncias de hostigamiento, acoso sexual, laboral y de otras agresiones no se darían al interior de dependencias públicas, consideró Rashida Manjoo, relatora especial sobre la Violencia contra la Mujer de Naciones Unidas.

Ello luego de que la relatora especial visitó el pasado 10 de julio la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y escuchara las denuncias de trabajadoras de dependencias federales.

El jueves 10 de julio Manjoo se reunió en privado con el presidente de la SCJN, el ministro Juan N. Silva Meza, para luego ofrecer una conferencia de prensa en la que recalcó que la violencia contra las mujeres es una grave violación a los Derechos Humanos (DH).

Tras su mensaje y la exposición del doctor Carlos Pérez Vázquez, coordinador de Derechos humanos y Asesoría de la Presidencia, trabajadoras del Consejo de la Judicatura Federal, del Centro de Justicia para las Mujeres (próximo a abrirse en el estado de Coahuila), de la Policía Federal (PF) y de la propia SCJN tomaron la palabra para denunciar ante la relatora el acoso, hostigamiento y abuso de poder que se han cometido en esas instancias contra las mujeres.

Dijeron que sus señalamientos y demandas penales no han tenido eco al interior de sus instituciones, y por el contrario derivaron en más agresiones, por lo que pidieron a la relatora que explicara cómo se puede garantizar el acceso a la justicia y la perspectiva de género si las y los funcionarios de las dependencias federales y estatales violentan a las mujeres.

Esther Torres Irene, que labora en la dirección general de Recursos Humanos de la SCJN, aseguró ser víctima de acoso laboral y denunció que no se le han abierto las puertas para exponer su caso; mientras que una trabajadora de la PF -quien omitió su nombre- expuso que las empleadas de esta dependencia son sometidas a un sistema jerárquico que las discrimina, y que cuando denuncian son castigadas.

Tras escuchar los relatos, Manjoo lamentó las circunstancias y aunque aclaró que no puede hacer un llamado a las dependencias, pues no conoce a fondo su funcionamiento, resaltó que estos hechos serían una muestra de que las autoridades mexicanas no actúan con la debida diligencia para implementar los programas y políticas destinadas a la erradicación de esta violencia, la cual calificó como un problema sistémico, ya que si "actuaran con la debida diligencia estos hechos no estarían sucediendo".

Añadió que en estos y todos los casos es indispensable que las mujeres accedan a la justicia, y que para ello se deben tomar medidas de protección, investigación y reparación del daño, que consideren el contexto en el que se cometen los delitos, así como todas las consecuencias que de ellos derivan.

Para Rashida Manjoo también es indispensable que los protocolos de actuación en la materia, como aquellos para juzgar con perspectiva de género e investigar el feminicidio, sean obligatorios para las y los servidores públicos y que sean sancionados cuando no los apliquen.

Durante la rueda de prensa subrayó que el hecho de que la violencia contra las mujeres sea una violación a los DH, obliga al Estado a actuar independientemente de que sean delitos individuales.

Por ello llamó a construir un sistema que garantice el acceso a la justicia a todas las mujeres, y que considere que ellas pueden enfrentar diversos tipos de violencia y discriminación al mismo tiempo.
Cimac Noticias