Asesinado otro reportero en México en un mes fatídico para los periodistas

Marco Antonio Ávila, redactor de noticias policiales, aparece muerto tras un día secuestrado Es el sexto profesional de los medios mexicanos ejecutado por el crimen en menos de un mes


Asesinado otro reportero en México en un mes fatídico para los periodistas

La Crónica de Chihuahua
Mayo de 2012, 07:21 am

La violencia contra los periodistas en México no se detiene. Este viernes ha aparecido asesinado, con signos de tortura, el reportero Marco Antonio Ávila García, de 39 años, que cubría información policial para El Regional de Sonora y para El Diario de Sonora, situados en el Estado norteño de Sonora, zona fuertemente afectada por el crimen organizado. Ávila es el sexto comunicador asesinado en México en menos de un mes.

El cadáver del reportero ha sido encontrado sobre las cuatro de la tarde del viernes (las once de la noche en la Península) metido en una bolsa de plástico negra al borde de una carretera rural entre las localidades sinaloenses de Guaymas y Empalme. En la escena del crimen también se halló un mensaje escrito por un cártel de la droga, según el fiscal de la Procuraduría (Fiscalía) de Sonora, José Larrinaga, que afirmó que no se revelaría el contenido del comunicado.

Marco Antonio Ávila había sido secuestrado un día antes en Ciudad Obregón, a unos 100 kilómetros de donde apareció ejecutado. De acuerdo con el portal de información mexicano Artículo 19, cuatro hombre armados y encapuchados con pasamontañas lo abordaron en una servicio de lavado de coches, le preguntaron si era periodista y se lo llevaron encañonado en un jeep.

El mismo viernes, antes de que se supiese que el periodista había sido asesinado, el Instituto Internacional de Prensa, con sede en Viena, urgió a las autoridades mexicanas a que hiciesen lo posible por rescatarlo."Las autoridades federales de México y de Sonora deben actuar de forma inmediata para localizar y liberar a Ávila, quien aparentemente fue secuestrado por el mero hecho de ser periodista", dijo la directora de este organismo, Alison Bethel McKenzie, en un comunicado que apremiaba a la acción de las instituciones mexicanas. "Los desafíos que afronta la seguridad pública en México son enormes y complejos", exponía la nota, "pero el Gobierno es finalmente el máximo responsable de que los periodistas puedan trabajar bien dentro de las fronteras del país".

Pero Ávila fue ’ejecutado’, como lo fueron otros 79 periodistas en México entre 2000 y 2011, según datos de la Comisión Nacional de Derechos Humanos mexicana. Y del mismo modo que ha ocurrido en el caso de muchos otros compañeros, nadie sabe quién ha sido ni por qué ha pasado.

El director de los dos diarios para los que escribía, Eduardo Flores, ha afirmado a la agencia estadounidense Associated Press que Ávila era un reportero policial con mucha experiencia, y prudente con respecto a los aspectos más delicados de la información sobre el crimen. Flores ha precisado que Ávila nunca mencionaba a los carteles de la droga por su nombre y que no hacía reportajes de investigación. El periodista muerto, según su director, no había recibido amenazas.

Marco Antonio Ávila García es el sexto periodista asesinado desde el pasado 29 de abril, cuando apareció muerta en el baño de su casa con el rostro y el cuerpo golpeados Regina Martínez, corresponsal en Veracruz (un Estado del sureste mexicano) de la prestigiosa revista Proceso. El jueves tres de mayo, Día Mundial de la Libertad de Prensa, se encontraron dentro de bolsas negras, también en Veracruz, los cadáveres desmembrados de tres fotoperiodistas dentro de bolsas negras. El 14 de mayo apareció asesinado otro periodista en la parte trasera de su coche en el Estado de Morelos (centro del país).

En 2011, México fue el tercer país más peligroso del mundo para los periodistas, detrás de Paquistán e Irán, según in estudio de Reporteros sin Fronteras