Arsénico de pozos agrícolas se pasa al ganado y a los humanos

**Este metal en grandes cantidades provoca daños a todos los organismos que lo lleguen a acumular en cantidades considerables.


Arsénico de pozos agrícolas se pasa al ganado y a los humanos

La Crónica de Chihuahua
Mayo de 2014, 20:39 pm

Gómez Palacio, Durango.- El agua contaminada con arsénico en pozos agrícolas, es fuente de contaminación también hacia el ganado, y de la carne de las vacas, el contenido se transmite a los humanos, debido a que el alojamiento del metal se fija con persistencia en los tejidos vivos.

Con una experiencia de poco más de ocho años en el estudio del arsénico, el catedrático investigador, Cristo Omar Puentes Valenzuela, de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED), afirmó que la investigación emprendida por el también investigador de la Universidad Tecnológica de Torreón (UTT), Hugo Alejandro Adame Buendía, que no sólo la vacas consumen este metal en el agua proveniente de los pozos profundos, sino también comen forrajes que contienen a éste.

Esto representa un foco rojo que es necesario atender para evitar mayores consecuencias, aseveró el investitgador, y de la misma manera confirmó la viabilidad del estudio en mención, dado que este metal en grandes cantidades provoca daños a todos los organismos que lo lleguen a acumular en cantidades considerables.

Puentes Valenzuela realizó su tesis de maestría en cuanto a los efectos del regado de alfalfa con agua que contenía altos niveles de arsénico, estudios que fueron realizados en una superficie controlada y supervisada, mismos que arrojaron un resultado de concentración del metal muy por encima del porcentaje recomendado por la OMS (Organización Mundial de la Salud).

"Todos los organismos tienen la capacidad de metabolizar el arsénico, pero es importante identificar que tipo de este metal es el que consumen los animales mediante el agua para poder valorar su toxicidad, y dentro de estos datos predomina el inorgánico, el cual no es el más tóxico pero entre más tome líquido más concentración tendrá en su organismo", opinó sobre este tema.

Mencionó que sobre este dato ya existen trabajos de investigación previos realizados por el Departamento de Geología de la UNAM, en la cual se realizó un monitoreo sobre los actores en el campo, es decir, sobre los efectos del arsénico en el forraje, el agua, así como la producción de leche, donde los resultados obtenidos son muy parecidos a los mencionados por el investigador de la UTT, concluyendo que la tasa de transferencia es muy baja, a la leche es muy poca, en comparación a la eliminación por la orina.

Recordó en este tema que el arsénico al ser un metal tiende a acumularse, lo que representa en sí el problema del consumo del líquido contaminado, dado que esto es lo que ocasiona que en los forrajes y animales su presencia sea difícil de eliminar.

Durante su estudio en la alfalfa dijo que los resultados obtenidos arrojan que este forraje llega a acumular hasta diez miligramos por kilogramo, lo que representa que animal no sólo consume agua con el metal sino forrajes con una alta concentración del mismo.

Destacó que los animales llegan a desechar un aproximado del 60 por ciento del arsénico consumido por medio de la orina y el resto llega a acumularse en el organismo de éste, desechándose por el sudor, las heces fecales y la leche, lo que representa un gran riesgo dado que al consumir más alimento y líquido con la presencia del metal, éste se acumulará y tendrá como resultado un aumento en la presencia del mismo en las excreciones de la vaca.

"La investigación en este sentido es viable, pero también es cierto que se tiene que profundizar en el tema, es decir, detectar todos las fuentes que proveen arsénico a la vaca, la flora intestinal del animal es muy bueno para poder metabolizar este metal, pero se tiene que revisar a fondo todos los aspectos para poder emitir una alerta en este aspecto", concluyó.