Amagan vecinos con armarse contra bandas delictivas

**En la colonia Dale, ya no aguantan la impunidad con que operan los grupos de delincuentes. **Parecen tener protección de la policía: denuncian colonos.


Amagan vecinos con armarse contra bandas delictivas

La Crónica de Chihuahua
Diciembre de 2010, 13:56 pm

Chihuahua, Chih.- Cansados ya de que la policía no remedie la inseguridad, habitantes de la colonia Dale dijeron que están dispuestos a armarse para defender sus propiedades y sus vidas. "Yo ya me convencí de que los rateros aquí le rinden cuentas a los patrulleros, y no estoy dispuesto a que nos sigan haciendo daño", advirtió José Antonio, quien vive en el perímetro de la placita.

De entrada, el padre de familia se deslindó de cualquier intento por conformar ningún grupo armado. "Ya lo hemos platicado. Lo vimos al principio como una puntada, pero ya estamos tomando muy en serio; algunos ya compraron una pistola".

 ¿Ojo por ojo? "No -dijo José Antonio-. Tengo que decirle que no creemos que la violencia sea la solución, pero yo sé que la ley nos protege si nos defendemos adentro de nuestra casa", acotó.

 ¿Qué tan grave está la inseguridad en la colonia Dale?, se le preguntó.

"Mira, si le preguntas aquí al señor del taller, él te va a dar detalles de los últimos robos de automóviles: apenas el viernes se llevaron una camioneta, y ahí le cae a él toda la información, y se encarga de aconsejarnos para que pongamos alarmas y sistemas de "corta-corriente" y otros similares".

En el lado Poniente de la colonia, hacia el arroyo de la Rosario, han sido incontables los robos de vehículos. "Acá a la vuelta de la escuela, les acaban de robar una camioneta de afuera de la casa a unos vecinos", señaló doña Emilita, vecina de la colonia.

"Hay unos cholos que esperan a que pasen parejas de jóvenes en la noche para asaltarlas (reseñó la doña): el otro día al novio de mi hija le quitaron el celular... eran dos: uno alto, pelón de barbita, y otro chaparro. Cuando llegó la patrulla, el agente les preguntó que si no era fulano, o sea, que sí se saben los nombres de los malandros.

Sí saben quiénes son y dónde viven, y todos dicen en el barrio que los rateros les pasan una "mochada" a los "chotas", y que por eso los dejan "trabajar" sin que sean molestados".
(Dic. 9, 2010)