Allá en el cielo recibirá su castigo: hermano de mujer asesinada por su marido

Se llevaran a Sinaloa los cuerpos de la madre y los niños que fueron envenenados por su propio esposo y padre


Allá en el cielo recibirá su castigo: hermano de mujer asesinada por su marido

La Crónica de Chihuahua
Mayo de 2014, 13:27 pm

Juárez, Chih.- “Yo no lo veo como mi enemigo, al contrario, le doy la mano y lo perdono… Allá arriba va a tener su castigo”, dijo Héctor Gerardo Ibarra medio hermano de Reyna Arcelia Beltrán Ibarra, mujer que fue envenenada junto con sus tres hijos por su esposo.

Sentados en la sala de la Fiscalía General del Estado Zona Norte, los hermanos de Reyna, a quien ella les decía “vida” cada vez que hablaba con ellos “Hola vida” por ejemplo, esperaban el cuerpo de su hermana y sus sobrinos.

“Estuvimos platicando como hasta las 11:30 de la noche del domingo, platicamos de comida, me decía que quería comer pescado frito, era lo que más le gustaba”, dijo su hermano Fernando, añadió ”Siempre fue una persona alegre, respetuosa y responsable”

A Reina la identifican sus familiares como una mujer que le gustaba mucho trabajar, dedicada e inteligente, “siempre le gustaron las ventas y la publicidad”, dijo Fernando Beltrán Ibarra, mientras sostenía entre sus manos el acta de nacimiento de su hermana y las de sus tres pequeños hijos.

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Aseguran que la noticia del multihomicidio trascendió hasta elestado de Sinaloa, donde medios de esa región del país han manejado el caso como un suicidio, a lo cual dice “duele que se diga eso”.

Fernando aseguró que fue el hermano del padre de los niños, quien se comunicó con los padres de Reyna para darles la noticia del fallecimiento de su hija y nietos.

“El hermano de él (Ociel) fue el que le habló a mi papá y le dio el pésame, le dijo que lo sentía mucho pero que su hija y sus nietos estaban muertos y que su hermano estaba como presunto culpable… Así tal cual, se lo dijo de frente”, agregó.

Agregó que luego de culminar con la identificación de los cuerpos y realizar las diligencias, procederán a trasladar a la madre y sus hijos hasta Los Mochis, Sinaloa, donde serán sepultados.

Con el llanto a punto de brotar, ambos hermanos aseguran no sentir rencor contra Ociel Herrera Bustos, acusado de asesinar a su familia. Al contrario, dicen perdonarlo.

“Yo quiero verlo, quiero ver su cara y los ojos, quiero ver qué tiene que decirme y él va a decirme a mí sin palabras qué fue lo que pasó… Ahí lo voy a descubrir, así voy a saber si es culpable o inocente.