Alcohol y mariguana, drogas más consumidas por los chihuahuenses

**El alcohol y la mariguana son las de mayor consumo, con un 30 y 21 por ciento de preferencia, respectivamente, seguidos del tabaco con un 11.

La Crónica de Chihuahua
Mayo de 2013, 18:09 pm

Chihuahua, Chih.- El alcohol y la mariguana son las drogas de mayor consumo en Chihuahua, con un 30 y 21 por ciento de preferencia, respectivamente, seguidos del tabaco con un 11, los adhesivos tuvieron el 8; cocaína un 7, heroína el 5 y los tranquilizantes con dos por ciento.

Lo anterior según una encuesta aplicada en el 2012 por el Sistema de Vigilancia Epidemiológica y de las Adicciones (Sisvea), entre seis mil 154 personas de Juárez, Chihuahua, Cuauhtémoc, Parral, Ojinaga, Gómez Farías, Guachochi y Nuevo Casas Grandes.

El 60 por ciento de los entrevistados dijo que la edad de inicio del consumo de drogas fue entre los cinco y 14 años, en tanto que el 37 por ciento lo hizo entre los 15 y 24 años, un dos por ciento entre los 25 y 44 años.

De las drogas de inicio se utilizaron en un 42 por ciento el tabaco, el 31 por ciento comenzó con el alcohol, un 15 con la mariguana, el seis por ciento con adhesivos, el dos con cocaína y heroína, respectivamente, y el uno por ciento con tranquilizantes.

Sobre la escolaridad de los entrevistados por el Sisvea, el 38 por ciento tenía estudios básicos de primaria, un 36 secundaria, el 13 bachillerato, un cinco por ciento estudios superiores, el tres por ciento estudios técnicos, un tres por ciento no sabía leer, ni escribir y el dos por ciento restante no tenía estudios, pero sí sabía leer y escribir.

De entre las personas entrevistadas según sexo de ocurrencia, en el estado de Chihuahua, el 90 por ciento eran varones y el 10 restante mujeres.

Según documento del Gobierno del Estado en el área de Desarrollo Humano y Social, dispuesto en Internet, el problema de las adicciones en México constituye uno de los más sensibles desafíos de los poderes públicos, familias y la sociedad.

Las adicciones crecen de tal manera que su proliferación pone en riesgo a la sociedad misma y sus instituciones políticas, y representa un desafío potencial, sobre todo si se considera que el 60 por ciento de las personas con adicción, no aceptan su problema.

De acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Adicciones en el país 3.5 millones de personas, un cinco por ciento de la población mexicana de entre 12 y 65 años consumió drogas alguna vez en su vida.