AMLO no será Presidente de la República en 2018: Zambrano

**No creo que los mexicanos permitan que haya un retroceso democrático, dice el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados


AMLO no será Presidente de la República en 2018: Zambrano

La Crónica de Chihuahua
Diciembre de 2015, 13:25 pm

El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, el perredista Jesús Zambrano, asegura que Andrés Manuel López Obrador no será Presidente de México en 2018, porque la sociedad no va a permitir un retroceso democrático ahora que sabe que el Partido Revolucionario Institucional dejó de ser invencible.

En entrevista, Zambrano Grijalva describe que López Obrador fue un magnífico jefe de Gobierno del Distrito Federal hasta 2006, pero después de eso pide analizarlo, porque ahora siembra una “enorme franja de duda” sobre cuál sería su comportamiento, pues pasó de proponer la “República amorosa” a ser un candidato que pone por delante el odio, la agresión y la descalificación.

En su oficina en la Mesa Directiva del Palacio Legislativo de San Lázaro, Zambrano dice que si López Obrador llega a ser Presidente argumentaría que enfrentó a la mafia del poder, incluso al propio Bronco, de Nuevo León, y metería a todos sus opositores a la cárcel y estaríamos ante un “gobierno dictatorial”.

El político sonorense se sincera y adelanta que el tabasqueño no será el candidato presidencial del PRD en 2018 porque se la pasa atacando y agrediendo a los integrantes del sol azteca, incluyéndolos en la mafia del poder y de corruptos no los baja. Además, comenta que el propio tabasqueño no quiere aliarse con el sol azteca y a fuerza “ni los zapatos entran”. Sin embargo, considera que si logran construir un bloque opositor amplio con Morena prácticamente serían invencibles.

El ex presidente nacional del PRD asegura que están dispuestos a aliarse con el PAN porque comparten ideales y puntos de programa de gobierno frente al autoritarismo y en un escenario tan competitivo, como lo será 2016, las alianzas son necesarias.

Zambrano Grijalva ve por lo menos seis alianzas electorales con Acción Nacional para las 12 gubernaturas que están en juego el próximo año, incluso describe que se van a constituir como fuertes bloques opositores al PRI en varios estados, con o sin Morena.

Sobre su instituto político dice que es un buen momento para un relanzamiento del PRD y la nueva dirigencia de Agustín Basave permitirá que se vinculen más con otros sectores de la sociedad. Es sincero y reconoce que el partido del solo azteca se fue alejando de algunos sectores y ahora están en un proceso de retorno.

FEPADE

Al preguntarle sobre el caso del fiscal especial de Delitos Electorales, Santiago Nieto, Jesús Zambrano asegura que él no ve ningún conflicto de intereses en este caso y hay una clara intención del PRI y del Verde para destituirlo por haber tomado una decisión que no le gustó a esos partidos.

Como ex presidente, ¿cómo ve al Partido de la Revolución Democrática con la dirigencia de Agustín Basave?

—Es un nuevo momento y una oportunidad significativa para que en un proceso de cambio también tengamos un relanzamiento, porque Agustín Basave es un intelectual muy prestigiado, ensayista, escritor de libros importantes, conocedor de la historia de nuestro país y es alguien que tiene un gran compromiso con el movimiento democrático, lo que va a llevar a que el PRD se abra más y nos vinculemos con otros sectores de la sociedad, la propia intelectualidad, por cierto, de la que el PRD se fue paulatinamente alejando, distanciando en los últimos años, estamos en ese proceso de retorno.

Un presidente que está convencido de que las alianzas son necesarias, que desde luego privilegiemos las que tienen que ver con la izquierda, pero que no nos detengamos allí, porque, además, la izquierda no se termina en el PRD y en Morena, va más allá, está en el movimiento social, en las organizaciones sindicales, en ONG y personalidades destacadas de nuestro país que forman parte de ese espectro.

Al mismo tiempo, que incluso estemos dispuestos a aliarnos con fuerzas políticas que no son de izquierda como son el PAN, pero con el que compartimos un conjunto de ideales o puntos de programa de gobierno para enfrentar el autoritarismo y que comparte con nosotros banderas como estos temas que hemos mencionado y que nos han permitido, como en 2010, ganar elecciones que nunca había perdido el PRI, por ejemplo, tres estados de la República.

¿Se deben hacer alianzas con el PAN el próximo año si quieren ganar las elecciones?

—Las alianzas siempre son necesarias. El PRI mismo hace coaliciones para poder ganar, particularmente las hace con el Verde, a veces las ha realizado con el Panal. En la historia del PRD también hemos transitado esta experiencia, empezamos a proponer y a hacer realidad las llamadas candidaturas externas, después empezamos a hacer alianzas, hace cinco años, en 2010 las hicimos con el PAN y nos permitió ganar estados de la República. Entonces, por qué no pensar en seguirlo haciendo, en un escenario tan competitivo como el que vivimos los últimos años, las alianzas son necesarias y el PRD, por lo tanto, también las necesita.

¿Ve una alianza de toda la izquierda, incluyendo Morena con el PAN, enfrentando al PRI?

—Lo que no veo es a Morena dispuesto a entrar en esquema de amplio espectro aliancista. Los veo más bien con resistencia, hasta existe rechazo de ellos para ir así. Pero, además, no creo que las coaliciones se vayan a poder dar en todos los estados de la República, cuando mucho, quizás, en la mitad que tendrán cambio de gubernatura, alianzas con el PAN me refiero. Con las otras fuerzas de izquierda, con el PT, quizás con Movimiento Ciudadano logremos hacer algún acuerdo en algunas entidades. Ese es el escenario que yo avizoro para 2016.

¿Pero no ve ninguna con coalición PRD-Morena?

—Es que hay una resistencia de ellos y a fuerza ni los zapatos entran.

¿Y ustedes sí quisieran tener una alianza con Andrés Manuel López Obrador?

—Nosotros hemos estado siempre abiertos a que eso suceda y vamos a construir amplios bloques opositores en contra del PRI con o sin Morena.

¿Cuál es su pronóstico hacia 2016, son 12 gubernaturas?

—Son 12, yo creo que claramente estarán en disputa por lo menos la mitad de ellas y con alta probabilidad de que nosotros repitamos en Oaxaca, en una alianza amplia, de que lo hagamos de nuevo, aunque no gobernamos con gente nuestra, en Puebla; podemos ganar en Tlaxcala, Veracruz y Zacatecas.

Particularmente en Tlaxcala y en Zacatecas con candidatos de izquierda, y, entonces el PRD podría alzarse con por lo menos tres triunfos electorales propios y acompañando la victoria en otras tres entidades de la República.

Está la posibilidad de hacer un acuerdo, una alianza en Durango o en Aguascalientes; fuera de ahí lo veo muy complicado, muy difícil que se logre. Desde luego, si pudiéramos construir un bloque opositor amplio en el que participe Morena, sería prácticamente el aseguramiento de victorias frente al PRI en todas estas elecciones.

¿No les ganarían con Morena?

—No nos ganarían, porque sumaríamos prácticamente toda la oposición real en contra del PRI y ahí están los números a la vista.

¿Ve a Andrés Manuel López Obradod como candidato del PRD a la presidencia en 2018?

—Hoy no, así te lo digo tajantemente. Por dos cosas: una, porque no se puede ir con un candidato que se la pasa agrediendo a sus posibles aliados el día de mañana, diciendo que somos parte de la mafia del poder, que somos unos corruptos, que estamos entregados a la mafia, etcétera, y que al mismo tiempo él mismo no quiere. Entonces, nos agrede, nos maltrata, nos insulta y, luego, él mismo dice: “Es más, con ustedes ni a la esquina para que les quede claro”.

Bueno, pues quién va a querer así a un candidato que pasó del discurso de la “República amorosa” en las elecciones de 2012 a un aspirante que pone por delante el odio, la agresión y la descalificación.

Ya se le olvidó el discurso amoroso y ahora es: “Todos los demás acuérdense de su santa madre, en el peor sentido de la palabra, porque son parte de la mafia del poder. Entonces, no se puede así.

¿Andrés Manuel sería un buen presidente para México?

—Con ese comportamiento, claramente no, no lo veo. No lo veo ni como candidato de una gran coalición y si no lo es, difícilmente, aunque fuera abanderado de Morena o de otros, difícilmente sería Presidente de la República. Y si llega a ser Presidente de la República diciendo que enfrentó a la mafia del poder, que hasta el propio Jaime Rodríguez El Bronco, de Nuevo León, es parte de lo mismo, entonces pues agárrense porque si son mafiosos los voy a meter a la cárcel ¿no?

A ver qué tan buen gobierno sería que el que llega metiera a la cárcel a todos los opositores, un gobierno dictatorial; pues, no, de ninguna manera yo creo que la sociedad mexicana no va a permitir un retroceso democrático que nos ha costado llegar a este escenario de pluralidad y de construcción de acuerdos, de entendimiento, de convivencia democrática entre distintas fuerzas de demostrar que el PRI ya dejó de ser invencible, pues difícilmente vamos a permitir que haya pasos en reversa.

¿AMLO sería un retroceso para el país?

—Con una visión como la que ha demostrado hasta ahora, estaríamos ante ese riesgo; claro, tampoco hay loco que coma lumbre ¿no? Si llegara a ser Presidente de la República tendrá que situarse con mayor objetividad o ubicar qué es lo que tiene enfrente, dónde está sentado, cuál es el tamaño de su responsabilidad.

Fue un magnífico jefe de Gobierno de 2000 a 2006, sin duda, no tengo ninguna objeción, y yo lo acompañé también como parte del equipo de gobierno, pero velo después de eso. Eso por lo menos siembra una enorme franja de duda sobre cuál podría ser su comportamiento.

Sobre el tema del fiscal de Delitos Electorales, ¿qué opinión te merece, debe renunciar, se debe quedar?

—Ese es un claro retroceso que están propiciando el PRI como partido gobernante y, desde luego, el Partido Verde que es al que pertenece el ex subsecretario de Gobernación.

Ahora resulta que cuando alguna autoridad electoral, particularmente, tome alguna decisión que no le guste al PRI, échale la caballería encima, acúsalo de que están siendo perseguidos políticos y pide su destitución. Entonces, imagínate cómo va a estar el fiscal si se concretara la pretensión del PRI y del Verde de destituirlo.

¿Qué va a hacer el nuevo fiscal que se llegara a nombrar para las elecciones de 2016? Pues estaría temeroso de actuar en contra de las anomalías que cometieran el Verde y el PRI.

O ¿en qué papel quedará el INE o el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación?, pues bajo la sombra del temor a tomar decisiones con independencia y con autonomía.

El fiscal actuó tomando en consideración el conjunto de elementos que tenía en disposición y, soy de los convencidos de que actuó correctamente, es un partido que, además, ha sido sancionado y parece que lo será otra vez, y así reiteradamente por la autoridad electoral, por el INE.

Entonces, debemos darle al fiscal toda nuestra confianza y que en todo caso, como lo anunció, que no revocaría, no apelaría la decisión del juez, pero que recompondría con nuevos elementos su propia acusación; vamos a esperar, hay que darle confianza.

¿No tiene ninguna responsabilidad porque no presentó en su currículum que estaba trabajando con el Partido de la Revolución Democrática en el Senado?

—Yo digo que no entró en un conflicto de interés. De verdad no sabía, particularmente los del Partido Revolucionario Institucional no sabían que había estado, en su momento, como asesor durante un tiempo con el grupo parlamentario del PRD. Y ahora va a significar también que cualquiera que haya trabajado de asesor de un grupo parlamentario ya quede impedido de por vida para ocupar un cargo, ¿en dónde está eso? ¿En qué ordenamiento legal está estipulado que así sea? En ninguno. Ese es mi punto de vista.
EL UNIVERSAL