2012, ¿El año de la mujer?

Hillary Clinton, Malala y las Pussy Riot, entre las finalistas de la revista Time, que apenas ha reconocido a mujeres desde que empezó a conceder el título de Persona del Año en 1927.


2012, ¿El año de la mujer?

La Crónica de Chihuahua
Diciembre de 2012, 09:10 am

Como tantas tradiciones venerables, nació de un error y de un apaño. En 1927, la revista Time cometió un error de juicio editorial al no poner al aviador Chalres Lindbergh en portada cuando completó el primer vuelo transatlántico. Así que a final de año inventaron algo para remediarlo: lo nombrarían Hombre del Año y lo colocarían en una portada de aspecto heroico que se vendería sola.

Y hasta ahora. Con una crucial y, a juicio de muchos, tardía modificación: en 1999 el Hombre del Año se transformó en Persona del Año para hacerlo menos sexista. El cambio no ha traído especial suerte a las mujeres en esta elección, que siempre han tenido una representación escasa y casi simbólica. Las últimas mujeres en ser reconocidas como Personas del Año fueron las llamadas "soplonas" o denunciantes, las tres "whistleblowers" que gracias a sus chivatazos destaparon escándalos en Enron, WorldCom y el FBI en 2002. En 2005 Time reconoció a Melinda Gates junto a su marido, Bill, por su activismo humanitario. Antes de eso, hay que recomontarse a 1986, cuando la dirigente filipina Corazon Aquino obtuvo el título. Las otras Mujeres del Año son escasas y variopintas, y premiadas por accidentes de nacimiento o matrimonio: la reina Isabel II el año de su coronación, 1952, Wallis Simpson, en 1936 y la esposa del líder chino (también junto a su marido) Chiang Kai-Shek en 1937.

¿Podría ser 2012 el Año de la Mujer en Time? Podría. Los nombres de los finalistas que sugiere la revista se conocen desde hace unas semanas y entre los más destacados están los de Hillary Clinton, las Pussy Riot, la líder birmana Aung San Suu Kyi, la nueva jefa de Yahoo Marissa Mayer, la gimnasta afroamericana (y nueva Novia de América) Gabby Douglas y quizá la que tiene más posibilidades reales de llevarse el título, la pakistaní de 15 años Malala Yousafzai. La bloguera que escribía sobre su deseo de ir al colegio en contra de lo que dicta el régimen talibán fue atacada y herida en un ataque contra el coche en el que viajaba el pasado 9 de octubre, lo que no hizo sino reforzar su imagen de icono global por los derechos de las mujeres en regímenes opresores. Prácticamente desde que se abrió la votación en la web de Time, Malala es quien acumula mayor número de votos positivos frente a un menor número de votos negativos. Le preceden en la lista el lídero coreano Kim Jong Un (recuerden: Persona del Año no siempre quiere decir Ídolo del Año. Hitler, Stalin y el Ayatolá Jomeini fueron Hombres del Año) y el presidente egipcio Mohamed Morsi, pero ambos están lastrados por un gran número de votos negativos. Y aun así, la última palabra no la tienen los lectores, sino los editores de la revista, que darán a conocer el nombre el próximo día 14.

Son muchos los blogueros y organizaciones que animan a votar por Malala, incluso la revista PC Magazine, por considerarla "una techie". Claro que no menos fervor online despiertan las Pussy Riot. La web de moda Refinery 29 pide el voto para las rusas por sus métodos además de por su mensaje: "Votar por ellas significa que, para bien o para mal, los movimientos pogresistas van ligados a los nuevos medios. (...) Los radicales necesitan más para sobresalir del montón, algo que las Pussy Riot hacen desde el momento en que se pusieron ese nombre", escriben. El gesto vuelve a revelar el idilio que el mundo de la moda vive con el grupo punk, y en especial con la atractiva Nadezhda Tolokonnikova, a pesar de lo que puedan pensar ellas mismas. Yekaterina Samutsevich, la miembro de la banda que fue liberada, reiteró la semana pasada que el grupo no está dispuesto a traficar con su nombre y explotarlo como marca comercial. Samutsevich aclaró que ellas no se están beneficiando de los miles de camisetas, por ejemplo, que se venden con su nombre. Entre otros sitios, en los puestos de merchandising de los conciertos de Madonna.

Hay otro nombre en la lista de finalistas de Time con pocas posibilidades reales de ganar, pero cuya sóla inclusión en la lista ha molestado en los sectores conservadores estadounidenses. Es el de Sandra Fluke, la estudiante de Derecho y activista por los derechos de las mujeres de 31 años a la que el presentador ultra Rush Limbauh llamó "puta" por testificar a favor de la gratuidad de los anticonceptivos en el Congreso. "Quiere que le paguen por practicar sexo", dijo Limbaugh. "Lo practica tanto que no le llega para anticonceptivos". Los Demócratas no tardaron en aprovechar el momento. Obama llamó personalmente a Fluke, convertida de la noche a la mañana en una celebridad nacional, para solidarizarse con ella y el partido le ofreció dar un discurso en su convención. Puede que con la inclusión de Fluke en la lista Time quiera reflejar lo sucedido en las últimas elecciones estadounidenses, cuando los derechos reproductivos y los llamados women issues acabaron cobrando una importancia inusitada debido a la radicalidad de algunos conservadores, que fue penalizada en los resultados electorales.

Aun menos probable que la coronación de Fluke como Mujer del Año lo es la de E.L. James, la autora de Cincuenta sombras de Grey, que también se cuela entre los 38 candidatos al título. Junto a ella hay otros fenómenos masivos cuya inclusión siempre genera chascarrillos. La más sonada de este año es la de Psy, el autor del Gangam Style, quien, por cierto, va cuarto en las votaciones, muy por delante por ejemplo de Obama o de Ai Wei Wei. En defensa de Psy, Time dice que "ha llegado donde ningún coreano llegó antes".

Time podría volver a salirse por la tangente optando por uno de esos honores colectivos que no suelen ser bien recibidos. El año pasado fue el año de "los que protestan" y en 2006 fuiste "tú" el ganador, "tú" entendido como cualquiera que genere contenidos online, ya sean actualizaciones de Linux o estatus de Facebook. Aquella fue una de las votaciones más criticadas, entre otros por aquellos que señalaron que, ese año, los nombres más votados en la web eran los de Hugo Chávez y Mahmoud Ahmadineyad.