Contrataca Juan Blanco: demostrará que fue Cano el que autorizó construir en Ávalos

**El PRI lo culpa de un acto irresponsable que, en realidad, involucra a todos los órdenes de gobierno, como fue el fraccionar y mandar habitantes a una zona contaminada.

La Crónica de Chihuahua
Enero de 2015, 15:25 pm

Por: Alejandro Salmón Aguilera/ ahoramismo.mx

Juan Blanco va a devolver el golpe, y al PRI no le va a gustar. Eso de que le hayan sacado a relucir el expediente de la autorización para construir vivienda en la zona contaminada de Ávalos le dolió al ex alcalde -según fuentes cercanas a él- y se dispone a refutar con documentos y hasta a devolver el golpe.

El ahora aspirante a diputado federal tiene a su alcance un paquete de documentos con los cuales demostrará -dicen- que fue su antecesor, Alejandro Cano Ricaud, del PRI, quien autorizó la expansión de la zona habitacional de Chihuahua sobre terrenos donde había grandes residuos de plomo y cadmio.

El tema lo había esbozado el cuarto de guerra de Blanco Zaldívar desde aquellos años cuando ocupaba la Presidencia Municipal y cuando Cano Ricaud era candidato a sucederlo en el cargo. Sin embargo, como el priista perdió las elecciones y el panista Carlos Borruel ganó la carrera para suceder a Blanco, el asunto se archivó… o mejor dicho, se guardó en cajas, para mejor ocasión. Esa mejor ocasión llegó hoy, cuando el PRI le ha echado la maquinaria encima para culparlo a él de un acto irresponsable que en realidad involucra a todos los órdenes de gobierno, como fue el fraccionar y mandar habitantes a Ávalos.

Lo de los residuos de plomo en la sangre de los habitantes de Ávalos y Ranchería Juárez, comunidades aledañas a la antigua planta de beneficios minerales “Industrial Minera México” salió a la luz desde el año de 1997, según se puede constatar en la hemeroteca de los diarios impresos, pero desde entonces se le ha querido echar tierra encima, así sea de esa que tiene plomo y otros metales pesados. Sólo ahora que el ex alcalde de Chihuahua busca reconstruir su carrera política lo sacan a colación y ahora sí con el tinte de alarma ambiental y sanitaria, como si el problema no hubiese ameritado atención desde años antes.

Blanco va a contraatacar con documentos en mano, para demostrar que desde la administración de Patricio Martínez, el Gobierno del Estado tenía pruebas de los índices de contaminación en Ávalos y, no obstante, Cano Ricaud autorizó el cambio de uso de suelo en la zona para fines habitacionales. Por otra parte, ninguna instancia de gobierno hizo mayor acción para atender el problema de salud que representaba la contaminación con plomo.

La estrategia del PRI, según fuentes internas del PAN, va dirigida a la base de votantes panistas para que no elijan a Juan Blanco como su candidato a diputado por el VI Distrito, donde el PRI ya de por sí la tiene difícil. Ya una vez funcionó la campaña en contra de él al interior del PAN, pues fueron los mismos panistas quienes, con un caudal de votos nulos nunca antes visto, evitaron que ganara la elección federal del año 2009 y, con ello, se proyectara hacia la gubernatura en el 2010.

Está como para pagar por ver este nuevo agarrón del PRI contra Blanco, pues esta vez existen en el ambiente otros escándalos de probable corrupción que hacen palidecer a aquellos añejos temas del relleno sanitario y los “Pony-arrendamientos”. En una guerra de lodo, nadie saldrá con la camisa limpia.

Por las vísperas se sacan los días y esta nueva campaña nos anuncia que las elecciones del 2015 no les ofrecerán absolutamente nada a los habitantes del municipio, del estado y del país. Ningún aspirante a diputado presentará una propuesta legislativa innovadora, viable y necesaria a los votantes. Lo único que tienen por ofrecer son razones para no votar por el otro candidato. Vaya campaña, pues.