"Tenemos un sistema que no quiere erradicar la delincuencia": autodefensa

***El jefe máximo de las autodefensas de Guerrero, Bruno Plácido, afirma que las autoridades siguen encubriendo a los verdaderos actores de la desaparición de los normalistas


La Crónica de Chihuahua
Septiembre de 2015, 09:32 am

Bruno Plácido Valerio es un indígena mixteco, hijo de Manuel Plácido de Jesús, ya fallecido, y de Porfiria Valerio Castrejón, quien murió el año pasado.

Nació el cuatro de marzo de 1969 en Azoyú, Costa Chica, en donde estudió hasta la secundaria. Contó que su familia es producto de la migración. Sus padres emigraron de la Montaña en los años 40 o 50 a consecuencia del hambre y del frío.

Líder de las Autodefensas de Guerrero agrupadas, tiene ideas bien claras del clima de inseguridad que se vive.

¿Este año sin los 43, qué ha dejado a las Autodefensas de Guerrero?

Muchas dudas, pero una certeza: El Gobierno (los tres niveles) ha aplicado una estrategia de manipulación de pruebas, evidencias y testimonios para que los verdaderos responsables de la desaparición masiva sigan sin castigo, para que sigan viviendo en la impunidad, reclama Bruno Plácido Valerio, jefe máximo de las Autodefensas de Guerrero agrupadas en la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG).

“Es lamentable que no ha habido cambios, sigue habiendo muertos. El problema es que el Gobierno no se deja ayudar. Es público que hay una gran impunidad de la delincuencia ¿Por qué le dan tanta vuelta para dar con el conflicto, el origen de este conflicto en Guerrero? Todos sabemos la impunidad con que se mueven los delincuentes; sabemos que todos los días hay muertos, secuestros, todos los días hay impunidad.

“Parece que tenemos un sistema que no quiere erradicar la delincuencia, solamente quiere mantener a delincuentes, por eso es difícil que los familiares que tienen víctimas que desaparecieron, (los encuentren), porque hay toda una estrategia de manipulación e impunidad y tiene que cambiar el modelo de gobernar, cambiar un formato de economía, de desarrollo, se tienen que cambiar las estrategias de seguridad. Mucha gente sigue con la esperanza de que ellos pongan el orden”.

“El cambio en este estado debe ser por los ciudadanos, que se organicen, se defiendan y ejerzan el derecho a la vida. Sin embargo, hay mucho terror, hay mucho miedo, pero no hay de otra: O nos organizamos, o seguimos viendo muertos. En las zonas donde tenemos presencia (las UPOEG) ha cambiado, hay tranquilidad. Digo, siguen pasando cosas, pero a comparación de otros lugares donde no hay organización, no hay garantías, hay desplazados (por la delincuencia). La gente tiene que organizarse, es la clave”, insiste este líder que proviene de la etnia mixteca.

Bruno, con esto que nos dice ¿Confía aún en el presidente Peña Nieto?

“No hay que confiar en nada ni en nadie, sino que hay que participar y cumplir todos. Precisamente ha habido fallos porque hemos creído en una persona. Hoy es que todos contribuyamos para solucionar los problemas.

“El Presidente tiene buenas intenciones, pero no puede solo, porque la mayor parte (de las autoridades) están coludidos… si los ciudadanos no participamos, no va a poder, aunque se hagan buenas leyes; si los ciudadanos no participamos no van a solucionar los problemas de inseguridad ni la pobreza.

¿Ha recibido amenazas por encabezar los principales grupos de búsqueda de los 43 normalistas?

“Sí, muchas, de parte de los delincuentes. Del Gobierno… ellos nos ven como una amenaza para el estado, cuando nosotros somos parte de una estabilidad en el

estado”.

¿Cree que algunos normalistas desaparecidos estén vivos?

“No quiero dar una opinión. Tenemos datos, pero no te quiero dar una opinión porque confundimos más. Esperemos que hoy, con la presión que hacen los padres de familia, igual con lo que nosotros hagamos, vaya saliendo la verdad, se vaya sabiendo la verdad de qué paso con todo este proceso”.

¿Pero usted los sigue buscando?

“Nosotros solamente ayudamos a organizar los comités de búsqueda; en Iguala hay un comité de búsqueda. Nosotros solamente estamos ayudando a que los familiares aprendan y se ayuden a buscar a los desaparecidos en Iguala y muchas partes del estado”.

Por toda esta inseguridad, por la inconformidad por los 43 ¿existe riesgo de un estallido social en Guerrero?

“Hay que apostarle a que no haya un estallido social, porque un estallido así como se nombra… tenemos que buscar una salida donde ganemos todos, no donde nos confrontemos, porque hoy, aunque esa ‘Guerra contra el Narco” haya sido una guerra contra los de abajo, creo que tenemos que salirnos de esa trampa donde los muertos seamos nosotros mismos.

“Busquemos una salida pacífica; cuando hablamos de “pacífica” no significa ser agachados ni no hacer nada, sino organizarnos para hacer cada quien, cada uno de nosotros, lo que nos corresponde hacer”.

Se dice que gran parte del problema de inseguridad en Guerrero se origina por las relaciones entre la minería y el crimen organizado

¿Es así, Bruno?

“Efectivamente, hay gente que quiere ganar dinero a costa de lo que sea y llevarse todo sin distribuir la riqueza que tenemos como guerrerenses. Hay que reorganizar todo: la minería, el medioambiente, las empresas de infraestructura, los abogados que utilizan a la delincuencia para someter al Ministerio Público para sacar sus víctimas… son todos, porque la delincuencia no opera por sí misma. Tenemos que revisar para que cambie todo eso.

“Desde el momento en cómo llega un Gobierno al poder comprando el voto, desde ese momento pierde amor a su pueblo, porque lo ven como material, como el poder comprado. Y cuando llegan comprando el poder, lo que hacen es entregar los bienes y las riquezas del País o de un estado a las manos de quien lo financió (electoralmente).

¿Se necesita un cambio de Gobierno?

No tenemos que cambiar el modelo de gobierno, tenemos que cambiar el modelo de economía, tenemos que cambiar las políticas públicas. No destruir… (hay que) cambiar la forma de hacer las cosas.
VANGUARDIA