Santiago de Cuba conmovida ante la pérdida física de Fidel Castro

** Las banderas cubana y rojinegra del Movimiento 26 de julio, fundado por él tras el asalto al cuartel Moncada en esa fecha de 1953, comienzan a poblar el paisaje citadino, junto a su cara reproducida en afiches, cuadros, vallas, pancartas y muchos soportes más.


Santiago de Cuba conmovida ante la pérdida física de Fidel Castro

La Crónica de Chihuahua
Noviembre de 2016, 19:00 pm

Prensa Latina, Por Martha Cabrales Arias.- Santiago de Cuba, 26 nov (PL) Unida a Fidel Castro por lazos entrañables desde su infancia, adolescencia y el inicio de sus luchas emancipadoras, esta ciudad vive este sábado transida de dolor ante su pérdida física.

En la medida que avanza la mañana la tristeza está en los hogares, en las calles, en los rostros de quienes no acaban de asimilar la noticia, a pesar de que su avanzada edad hacía presumir, más temprano que tarde, el desenlace.

Las banderas cubana y rojinegra del Movimiento 26 de julio, fundado por él tras el asalto al cuartel Moncada en esa fecha de 1953, comienzan a poblar el paisaje citadino, junto a su cara reproducida en afiches, cuadros, vallas, pancartas y muchos soportes más.

Acuden a la mente su elección como delegado al VII Congreso del Partido Comunista de Cuba, el 3 de febrero último, por los secretarios generales de núcleos en el distrito José Martí, y tantas ocasiones memorables durante las cuales el líder compartió con los santiagueros.

En el Museo instalado en la antigua fortaleza militar, convertida en escuela tras el triunfo revolucionario de 1959, el colectivo guarda con especial cariño la última visita realizada por él el 20 de enero del 2003, acompañado por el periodista francés Ignacio Ramonet cuando preparaba su libro Cien horas con Fidel.

Son muchas las familias santiagueras que evocan hoy, aún con emoción, aquella madrugada del 8 de junio del 2002, cuando cientos de miles se volcaron hacia la Plaza de la Revolución Antonio Maceo a compartir con el dirigente.

Desafiando la lluvia y la oscuridad, desde aproximadamente la una antes meridiano, hombres, mujeres y niños de la urbe se movieron a pie y calladamente hacia ese punto de reunión, donde convergerían con otros tantos llegados por carretera desde la vecina provincia de Guantánamo y otros territorios cercanos.

Prensa Latina