Osos polares no invernarían durante el verano: estudio

**Dos investigadores inspeccionan a un oso polar al norte de la bahía Prudhoe Bay, en Alaska. (The New York Times)


Osos polares no invernarían durante el verano: estudio

La Crónica de Chihuahua
Julio de 2015, 09:47 am

James Gorman / New York Times

Nueva York.- Desde hace largo tiempo los científicos han contemplado la posibilidad de que los osos polares entren en una especie de hibernación de pie que reduzca sus exigencias energéticas durante el verano, cuando los alimentos en tierra son escasos.

Ciertas investigaciones han apoyado la idea, mientras que las búsquedas por Internet suelen dar como resultado sitios donde se menciona como un hecho. Pero en un nuevo estudio de varios años de duración en el cual se monitorearon las temperaturas de osos que viven en hielo y en tierra no se descubrió evidencia alguna de las drásticas bajas en la temperatura corporal que indican un descenso en la necesidad de comida durante el verano.

“No encontramos nada que parezca hibernación”, dijo el doctor John P. Whiteman, el biólogo de la Universidad de Wyoming que realizó la mayor parte del estudio.

Andrew Derocher, biólogo de osos en la Universidad de Alberta y científico asesor de Osos Polares Internacional, una organización dedicada a la conservación del oso polar, señaló que los hallazgos se suman a las inquietudes en torno al futuro de los osos polares debido a que en la tierra las fuentes alimentarias son más escasas a comparación de las focas que los osos comen cuando se hallan en el hielo. Un estado similar a la hibernación constituiría una potencial defensa fisiológica para ayudarlos a sobrellevar en tierra las fuentes reducidas de alimento durante veranos que a raíz del cambio climático están volviéndose más prolongados.

El boletín Science publicó ayer un informe sobre la investigación de Whiteman, apoyado por Henry J. Harlow y Merav Ben-David, quienes también son biólogos en Wyoming, y otros científicos adscritos a la Inspección Geológica de Estados Unidos, el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos, ambos con domicilio en Anchorage, Alaska, y Osos Polares Internacional. Derocher fue uno de los investigadores a quienes el boletín solicitó revisar el trabajo antes de publicarlo.

Whiteman señaló que el aspecto más importante del estudio era que reunía diversa información respecto a la fisiología del oso durante los veranos que los osos pasaron por varios años en tierra y en hielo.

“No había nada de estos datos”, dijo, debido a lo difícil que resulta obtenerlos.

Los científicos usaron helicópteros y un rompehielos para localizar y alcanzar a los osos mediante dardos con tranquilizantes. El estudio se llevó a cabo en el Mar de Beaufort, al norte de Alaska y Canadá, y en la costa del mismo.

Los investigadores instalaron pantallas para el viento y luces, dijo Whiteman, “intentando reproducir una sala de cirugía animal en el campo”. En los abdómenes de 10 osos colocaron dispositivos destinados a registrar su temperatura corporal. También emplearon collares a fin de rastrear el paradero y los niveles de actividad, poniendo grabadoras de temperatura en el trasero de algunos de los osos.

En total se estudiaron cerca de 12 osos, con el objetivo general de obtener un panorama más claro con respecto a la fisiología de los osos polares durante el verano. Los científicos tomaron asimismo medidas del cuerpo y el pelaje y muestras de sangre.