Orgullosos de su independencia financiera, los antorchistas desmienten campaña de descrédito

** “Estamos sumamente orgullosos de la salud financiera de nuestros negocios, de su multiplicación y diversificación, porque el correcto financiamiento de la actividad de nuestra organización, demuestra irrefutablemente la limpieza de su manejo”.


Orgullosos de su independencia financiera, los antorchistas desmienten campaña de descrédito

La Crónica de Chihuahua
Enero de 2019, 18:36 pm

Chihuahua, Chih.- Antorcha Campesina no solamente niega que tenga negocios ilícitos, sino que pregona con mucho orgullo que los negocios que han llegado a montar han hecho la diferencia entre ellos y otras organizaciones sociales e incluso partidos políticos, “porque gracias a estos negocios que hemos llegado a tener, junto con la colecta pública y las aportaciones de profesionistas que militan con nosotros, podemos presumir nuestra total independencia económica y, por lo tanto, independencia política con respecto al poder público”.

Así respondió el Movimiento Antorchista de Chihuahua, a las insinuaciones maliciosas y elucubraciones tendenciosas con que la “periodista” Fátima Monterrosa elaboró un reportaje televisivo que fue presentado el jueves pasado en el noticiario nocturno de Televisa, conducido por Denise Maerker. En esta pieza de periodismo parcial y rastrero, se cubrió con un manto de “misterio”, como si fuera un tenebroso secreto, milagrosamente descubierto por la reportera, que Antorcha Campesina posee y opera gasolineras en diversos estados del país, de las cuales menciona ubicación y dueño solo en los casos en que hay alguna relación de parentesco con el dirigente nacional de Antorcha, Aquiles Córdova Morán.

“En realidad –señaló Lenin Nelson Rosales Córdova, dirigente estatal del Movimiento Antorchista, en rueda de prensa con periodistas locales-, hay que señalar de entrada que el supuesto ‘hallazgo’ de Fátima Monterrosa, es un trabajo que elaboró por pedido de alguien interesado en enlodar la imagen pública de nuestra organización”. “No nos engaña su tono presuntamente profesional”.

El arma principal con que Monterrosa ataca a Antorcha son las insinuaciones (“de paso hay que decir que no hay nada más antiperiodístico que las insinuaciones”): ella se abstiene de formular acusaciones expresas y comprometedoras y, a cambio de ello, manipula la información de modo que sugiera con mucha fuerza lo que la reportera desea pero no puede decir, dejando que sea el propio lector quien saque las conclusiones malévolas insinuadas por ella. Y luego, que el mismo televidente califique y condene la corrupción de los antorchistas.

“Ni son negocios ilícitos, ni el hecho de poseer una gasolinera es tampoco un delito”, expresó Lenin Nelson Rosales. “¿Puede alguien sensato acusar de esa manera a una organización cuya existencia y actuación son públicas y están a la vista de todo el mundo; a una organización social formada por más de dos millones de trabajadores del campo y la ciudad, estudiantes, maestros, pequeños empresarios y comerciantes y que, además, gobierna desde hace veinte años diversos municipios, algunos cuya población se equipara a la de los estados más pequeños del país?”.

“¿Es posible, sin ser un canalla, lanzar semejante agravio a quienes nunca le han hecho mal a nadie, y menos a la señora reportera que con tal sevicia los insulta? Lo cierto es que el tal reportaje, que no es nuevo, sino que la señora reportera lo que hizo fue reciclar un viejo ataque del que ni siquiera actualizó las imágenes, fue calculado, en sus términos y en el momento de su aparición, para servir como disparo de salida al ejército de injuriadores e intimidadores que operan en las redes contra los “enemigos” de Morena, y para poner en acción los bots que tienen contratados con el mismo propósito”.

Estamos sumamente orgullosos de la salud financiera de nuestros negocios, de su multiplicación y diversificación, porque el correcto financiamiento de la actividad de nuestra organización (que tampoco se limita a la gestión de obras y servicios y a la lucha en las calles, sino que se extiende al deporte, la cultura y la educación de sus mejores cuadros jóvenes, con resultados muy superiores a lo hecho por cualquiera otra organización o partido) demuestra irrefutablemente la limpieza de su manejo, la aplicación de las utilidades a los fines legítimos de la organización, y la falsedad y torpeza mental de quienes, citando nombres de los propietarios formales, creen haber probado el enriquecimiento escandaloso y obsceno del líder nacional antorchista, concluyó Rosales Córdova.