Muertes por monóxido, vulnerabilidad ante el frío

** Opinión.


Muertes por monóxido, vulnerabilidad ante el frío

La Crónica de Chihuahua
Enero de 2016, 13:00 pm

Antonio López R.

Las muertes y daños ocasionados por aspiración del monóxido de carbono es algo que se ha mantenido en rincones oscuros por parte de autoridades, ni siquiera hay estadísticas que muestren a nivel nacional o estatal las pérdidas humanas derivadas de este tipo de intoxicación, pero se calcula en miles, estima el Centro toxicológico ángeles, ubicado en el Distrito Federal.

Las campañas oficiales se centran en recordar que no hay que dejar objetos encendidos durante la noche, que se debe dejar una apertura que permita la circulación de aire, en otras palabras resistir el intenso frio lo más posible, así, la población vulnerable sucumbe ante otros males, las enfermedades respiratorias o las infecciones, que ocasionan su dosis de mal por temporada.

A falta de estudios oficiales, los efectos ocasionados a la ciudadanía por la intoxicación de monóxido de carbono, se vuelven como un fantasma que mata poco a poco a muchos, y de golpe a otros, ya sea en su forma aguda (aquellos que han estado en un incendio) o crónica (aquellos expuestos durante largos períodos al monóxido), pues ocasiona severos daños a la salud primordialmente a nivel de pulmones y del sistema cardiovascular.

Se sabe que la exposición al monóxido por años genera una intoxicación crónica, y deteriora la salud, los expuestos constantemente al toxico desarrollan problemas como si fuera un fumador o como si se expusiera constantemente a gases, dañan su pulmón y su sistema cardiovascular, provoca que los expuestos no logren un adecuado descanso, que a diario tengan dolor de cabeza, e irritabilidad.

En un evento agudo como sucede durante los incendios, el organismo puede tardar hasta siete horas en desechar los residuos de este gas tóxico que compite por ganarle terreno al oxígeno y puede llevar a la muerte al paciente si no recibe atención médica inmediata.

Las muertes e intoxicaciones por monóxido de carbono son un mal que el pueblo podría combatir, si tuviese los ingresos económicos y medios adecuados para evitar el frío en épocas invernales, pero los hechos muestran lo contrario, así pues, aparte de la poca prevención, queda la vulnerabilidad de los pobres ante el frío, y el helado desinterés por ayudarlos.