Mortal e imposible paso peatonal en pleno Periférico de la Juventud

**En Chihuahua capital, a los desarrolladores urbanos se les olvidaron los peatones, los niños de las escuelas, y conservaron el letrero en un área de 50 kilómetros por hora.


Mortal e imposible paso peatonal en pleno Periférico de la Juventud

La Crónica de Chihuahua
Julio de 2014, 10:00 am

Chihuahua, Chih.- Imposible, se antoja un paso peatonal en pleno Periférico de la Juventud, en una zona marcada como de 50 kilómetros por hora. De un lado está la colonia Campesina y del otro, la colonia Alfredo Chávez: de este lado están la escuela primaria y el Oxxo, que atraen a mucha gente que viene a pie.

Se antoja imposible el paso peatonal, pero ahí está el letrero absurdo, amarillo fuerte y romboide, con las figuritas estilizadas de dos niños con libros bajo el brazo, es decir, ¡se trata de un paso escolar! Pero aunque suene increíble, ahí está también, colocado para información de los automovilistas, el límite de velocidad, que es aquí de 50 kilómetros.

¿Donde suceden estas cosas?

Acá, en días entre semana y en medio del periodo escolar, es obligado presenciar cómo viene un ama de casa con dos niños de la mano, de regreso a la Campesina porque acaba de recogerlos de la Primaria Cuauhtémoc, que está del otro lado del Periférico. La señora pasa los carriles del cuerpo lateral, con mucho cuidado, y se posiciona en el primero de los camellones, y espera a que no venga ningún vehículo por los carriles de ida a Cuauhtémoc, y entonces se cruza con sus bodoques, tironeándolos para que no se le vayan a quedar en medio de la autopista.

Pero en tramos, subir a estos camellones es tarea de atletas, porque son altos y tienen una especie de barrera. Obviamente, la señora se metió a algo que no es un paso escolar.

Ya que está en el segundo camellón, hay que ver al otro lado para ver cuándo puede pasar evitando el horroroso flujo de bólidos que vienen desatados, saliendo de la curva donde los automóviles dejan la avenida Silvestre Terrazas y se internan en el desnivel para salir al Periférico de la Juventud.

Pues ya pasado este tercer cuerpo de carriles, falta sortear la lateral que corre pegada a la Campesina, que siempre está saturada de vehículos que, para variar, no saben que éste es un paso peatonal.

Seguimos a una señora, nada más a la hora de recoger a los niños de la Escuela Primaria, pero en la mañana, esa misma señora los llevó de ida, y a una hora en que el tránsito por el Periférico es especialmente espeso.

Pero tenga en cuenta el lector paciente, que son decenas de hombres y mujeres los que llevan y traen niños a toda hora, y cientos, muchos cientos más, de personas que cruzan por acá en ambos sentidos, desde y hacia calles que en la Alfredo Chávez son la Río Usumacinta, la Río Grijalva y la de la escuela, la Río Papaloapan. Y bueno, del lado de la colonia Campesina están la Bugambilias, la Magnolias y la calle Gardenias, esta última de mucho tráfico.

En caridad de la justicia social más elemental: ¿Sería mucho pedir que se instalara aquí un puente peatonal elevado para evitar tanta zozobra y tanto pavor a esta pobre gente?