Mientras Almeida defendía los mantos acuíferos ¿dónde estaba el partido “que sí cumple"?

**Mientras la representación legislativa del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) defendía a los animales del circo, Almeida defendía el subsuelo de Chihuahua.

La Crónica de Chihuahua
Febrero de 2015, 13:34 pm

Por: Alejandro Salmón Aguilera/ ahoramismo.mx

Después de enterarnos de la lamentable muerte del ex alcalde y activista ambiental, Alberto Almeida, no podemos dejar de hacernos esta pregunta: ¿y dónde estaba el partido ecologista “Que sí cumple” cuando la reciente víctima de la violencia protestaba contra la extracción ilegal de agua del subsuelo de Chihuahua?

Mientras la representación legislativa del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) defendía a los animales del circo, Almeida defendía el subsuelo de Chihuahua y, con ello, a una cantidad difícil de determinar de especies animales, de insectos y microorganismos que padecerán si se sigue explotando el inventario hidráulico del estado de la manera irracional como se está haciendo.

¡Qué fácil la agarró el PVEM! Protestar contra los circos, establecimientos que en su mayoría son negocios familiares, cuyos dueños no son, ni de cerca, gente poderosa con alcances o influencias para defender sus limitados intereses. Era más fácil enfrentarse a los hermanos Atayde para impedirles que presenten números con elefantes o leones—en lo cual podemos estar de acuerdo—que a los grupos de interés que sobre-explotan el manto acuífero de Cuauhtémoc o de Ascensión, por mencionar los más afectados.

Almeida es, por desgracia, el segundo activista en contra de la sobre-explotación del agua en Chihuahua que cae víctima de homicidas desconocidos y presumiblemente a sueldo. Antes, el 30 de octubre del año 2012, el matrimonio compuesto por Ismael Solorio y Manuela Solís fue víctima de un o unos homicidas quienes los asesinaron y después los dejaron a la vera de la carretera entre Cuauhtémoc y la sección de Álvaro Obregón.

Solorio había protestado no sólo contra la extracción ilegal y abusiva del agua del subsuelo, también sino contra retención irregular del flujo del río El Carmen, y contra la operación de la mina Meg Silver, a la cual acusaban de verter contaminantes. En ningún momento vimos al PVEM acompañar esas protestas. El que sí se dejó ver al lado de Solorio fue Almeida, la víctima de la violencia caído el martes pasado en el estacionamiento de un supermercado ubicado en Juárez.

El Barzón, organización que ha mantenido una férrea controversia con comunidades enonitas por el uso del agua para fines agrícolas, emitió un comunicado en el cual hace recordar que Alberto Almeida era ex alcalde de Villa Ahumada, pero también un empresario del ramo agrícola que había sido un “tenaz oponente a la devastación de desierto Chihuahuense”.

“En su activismo en defensa del medio ambiente, realizó diversas denuncias que tocaron intereses económicos. Este defensor exigió el cese a la sobreexplotación del acuífero Flores Magón Ahumada, realizada por miembros de la comunidad menonita”, añade el documento.

Alberto presentó diversas denuncias penales ante la Procuraduría General de la República por ilegales perforaciones de pozos del Rancho Santa Rita, lo que ocasionó la clausura de varias perforaciones. Igualmente, presentó denuncias por el robo de energía eléctrica de los predios las Águilas, la Gregoria, Chivatito, Las Cuatas I y II, y Los lamentos.

En ninguna de esas denuncias apareció el PVEM para apoyar la causa. A la fecha, se sigue esperando que el partido que “sí cumple” haga al menos un solo pronunciamiento en torno al uso abusivo del agua en Chihuahua. Eso se lo puede, o mejor dicho, se lo debe reclamar la sociedad chihuahuense, porque para eso se le dio representación en el Congreso local: para que defendiera las causas ambientales, no para que nos obligue a ver sus anuncios en las funciones de cine.