Más de 30 mil personas marchan en Moscú

**Activistas salieron a las calles de Moscú para condenar la revolución del Maidán en Ucrania, que muchos califican de golpe de Estado.


Más de 30 mil personas marchan en Moscú

La Crónica de Chihuahua
Febrero de 2015, 16:35 pm

Moscú (EFE).- Alrededor de 35 mil personas, según la policía, recorrieron hoy el centro de Moscú en una marcha para condenar la revolución del Maidán que hace justo un año derrocó al entonces presidente ucraniano, Víktor Yanukóvich, tras tres días de sangrientos disturbios.

Los manifestantes, convocados por un centenar de organizaciones sociales, portaron banderas rusas y pancartas que rezaban consignas contra una revolución que muchos en Rusia, incluidas las autoridades con el presidente Vladímir Putin al frente, califican de golpe de Estado.

“No perdonaremos el asesinato de nuestros hermanos”, “¿Hoy el Maidán y mañana la guerra?”, “Rusia, en contra del Maidán”, rezaban algunas de las pancartas, citadas por las agencias rusas.

La protesta concluyó con un mitin en la plaza de la Revolución de la capital rusa, aledaña a la plaza Roja y prácticamente junto al Kremlin, una zona vetada para las manifestaciones de la oposición extraparlamentaria rusa.

Aunque el número de manifestantes superó de largo a las 10,000 personas para las que se había autorizado la marcha, la policía de Moscú ya adelantó que no multará a los organizadores.

“Para que haya multa, la cantidad de manifestantes debe provocar consecuencias negativas como la amenaza a la vida de los ciudadanos o la obstrucción al funcionamiento normal de las infraestructuras municipales, algo que no hemos visto”, dijo el jefe de Seguridad de la policía moscovita, Alexéi Mayórov.

Hace un año, entre el 18 y el 20 de febrero de 2014 y tras tres meses de multitudinarias protestas contra el régimen de Yanukóvich, el centró de Kiev estalló en sangrientos disturbios que se llevaron la vida de más de cien personas, entre manifestantes y policías.

Dos días más tarde, Yanukóvich fue depuesto de su cargo por el Parlamento ucraniano, que al constatar que había huido de Kiev en la madrugada del 22 de febrero, tardó apenas unas horas en acusarle de dejación de funciones para desposeerle de sus facultades de jefe de Estado.

El expresidente ucraniano huyó a Rusia, donde permanece refugiado hasta ahora a pesar de que la Interpol ha dictado una orden de búsqueda internacional contra él por una serie de delitos financieros que le imputa la Justicia de su país.