Le quitan presupuesto a los que hacen bien su trabajo, y a los partidos ni quién los toque

**Dependencias como el Ichimujer, hacen trabajo digno de replicarse en entidades vecinas, pero si les seguimos quitando dinero, terminarán como organizaciones de caridad.

La Crónica de Chihuahua
Octubre de 2015, 14:48 pm

Por: Alejandro Salmón Aguilera

Tal parece que este es el mundo al revés. En Chihuahua, al menos, le quitamos presupuesto a las dependencias que forman parte de programas que son dignos de ser imitados por otras entidades del país, mientras que a otros no se les toca ni con el pétalo de un ajuste presupuestal.

Ahí está el ejemplo del Instituto Chihuahuense de la Mujer, el “Ichimujer”, organismo que atiende a decenas de mujeres en situaciones de riesgo, de distinta intensidad, y que ha promovido la instauración del llamado “Protocolo Alba” o “Amber”, el cual ya es material de exportación.

El “Amber”, como se aplica en Chihuahua, ha sido ya un ejemplo a seguir en estados donde no tienen indicadores de desaparición de personas tan elevadas como las que tiene la entidad, lo cual hace ver que sí se han entregado resultados satisfactorios aún con el poco dinero que se gasta en esos operativos de alerta.

Sin embargo, el Ichimujer ha sido uno de los organismos más castigados con el recorte presupuestal aplicado este año con motivo del llamado “Presupuesto cero”.

Según lo declaró a este medio la directora de Ichimujer, Emma Saldaña, la dependencia a su cargo aguanta cada mes recortes de hasta de 170 mil pesos, es decir, más de 2 millones de pesos al año. Si ya de por sí le daban apenas 33.3 millones de pesos al año para atender un mundanal de asuntos relacionados con la población femenil de la entidad, habrá qué imaginarse los aprietos por los que pasa ahora que le quitaron cerca del 10 por ciento de esa reducida cantidad.

Nada más para darnos una idea, en Chihuahua hay 2,719,448 personas mayores de 15 años, según estadísticas de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social. De ese total, el 50.9 por ciento son mujeres, es decir, casi un millón 400 mil de ese sector de población son mujeres. En estricto sentido, ese es el universo al cual debe atender el Ichimujer. No lo ha de hacer tan mal que su programa Amber ya es ejemplo a seguir y hasta a exportar. Entonces ¿por qué le quitan dinero?

En el otro extremo vemos a los partidos políticos, a los cuales se les entregan religiosamente sus prerrogativas que, en conjunto, suman 124.2 millones de pesos. Ahí no hay Prepuesto cero que valga. Los partidos—todos los que estaban ahí, hasta los que ahora reniegan porque el Gobierno da subvenciones a otros sectores—cuando aprobaron una reforma para garantizar que los partidos recibirían una fuerte tajada del presupuesto año tras año.

¿Resultados? Ahí están a la vista: Chihuahua fue el tercer lugar nacional en abstencionismo en las pasadas elecciones federales intermedias, señal de que los partidos políticos no encantaron a la sociedad. Tampoco lograron cubrir al 100 por ciento la representación de sus partidos en casillas electorales, lo cual indica que no invirtieron lo necesario para desarrollo y capacitación de cuadros. Entonces ¿en qué se gastaron el dinero?

Ahí no hay presupuesto con base en resultados. Simplemente se les calcula su porcentaje de votación y se les da su dinero. Ni quién diga nada. Seguramente hay otras dependencias que, como el Ichimujer, hacen trabajo digno de replicarse en entidades vecinas, pero si les seguimos quitando dinero, terminarán como organizaciones de caridad.