LAGEOS, el satélite que recordará la Tierra actual dentro de 8,4 millones de años

*Lanzado el 4 de mayo de 1976, hace ahora 46 años, LAGEOS 1 (Laser Geodynamic Satellite) está previsto que caiga de nuevo a nuestro planeta dentro de 8,4 millones de años.


LAGEOS, el satélite que recordará la Tierra actual dentro de 8,4 millones de años

La Crónica de Chihuahua
Mayo de 2016, 09:04 am

Ciudad de México.- Varias naves espaciales estadounidenses dirigidas al espacio profundo fueron equipadas hace decenios con placas descriptivas sobre la civilización humana y nuestro lugar en el Universo.

Pero un satélite orbital también recibió su propia placa. Lanzado el 4 de mayo de 1976, hace ahora 46 años, LAGEOS 1 (Laser Geodynamic Satellite) está previsto que caiga de nuevo a nuestro planeta dentro de 8,4 millones de años. Habla de nosotros por si otra especie inteligente terrestre o de otro mundo habitase aquí.

Dedicada a estudiar la forma, rotación y campo de gravedad terrestre, esta misión de la NASA lleva una placa diseñada por Carl Sagan como mensaje para futuras civilizaciones. En la parte superior, los números del uno al 10 se escriben en notación binaria, y la Tierra se muestra en órbita alrededor del sol, informa la NASA.

Los tres paneles inferiores muestran los mapas de la Tierra en diferentes épocas. Uno muestra a la Tierra hace 268 millones de años, cuando los continentes estaban unidos en Pangea. El mapa del medio muestra los continentes cuando LAGEOS puso en marcha. El último panel proyecta la configuración de la litosfera dentro de 8,4 millones de años en el futuro - cuando el satélite se prevé que caiga a la Tierra.

Placa a bordo del LAGEOS, con información sobre las placas tectónicas- NASA’s Goddard Space Flight Center

Al igual que su gemelo lanzado en 1992, LAGEOS 1 tiene un cuerpo esférico de latón recubierto de aluminio. Estos materiales fueron elegidos para reducir el efecto del campo magnético terrestre sobre el satélite. Tienen un diámetro de 60 centímetros y una masa aproximada de 405 kilogramos. Su exterior está cubierto con 426 retroreflectores, dándoles el aspecto de una pelota de golf gigante.

Estos satélites, que se mantienen en órbita en plena forma, están diseñados para durar: no tienen a bordo ningún sensor o dispositivo electrónico ni sistemas de control de altitud. También carecen de piezas móviles. Se mueven en órbita libre alrededor de la Tierra, a una altitud aproximada de 5.900 kilómetros, por encima de la órbita baja terrestre y por debajo de la órbita geosincrónica. Su periodicidad es de aproximadamente 204 minutos, esto es, pasan por un mismo punto cada 3 horas 24 minutos.