Enojo priista: por 10 mil votos no se van al tercer lugar

**Vaya chasco. Ahora resulta que sus ex socios no sólo les han quitado las curules plurinominales que pudieron ganar para compensar un poco la sonora derrota, sino que éstos ya se andan acercando al PAN para hacer alianzas.


Enojo priista: por 10 mil votos no se van al tercer lugar

La Crónica de Chihuahua
Junio de 2016, 21:47 pm

Por: Alejandro Salmón Aguilera/ ahoramismo.mx

El priismo está pasando por una situación que a algunos les avergüenza, a otros les aflige y, en general a todos les enoja.

No se trata sólo de la derrota apabullante del domingo 5 de junio, sino de la forma como prácticamente se convirtieron en un “mini-partido” que anda tratando de jurgunear las cifras para ver si logra tomar una diputación plurinominal para su primer lugar en la lista, Víctor Valencia de los Santos.

La situación tiene enojados a muchos priistas y, nos dicen, es prácticamente un sentimiento generalizado. ¿Por qué su dirigencia le regaló toda la votación a partidos que no tienen peso electoral alguno y a los que hay qué premiar a lo largo de toda la legislatura para que aprueben las iniciativas difíciles?

No sólo es el dinero que perderán en prerrogativas, sino el lugar en el que se verán en esa especie de tabla de posiciones en lo que se convierten los porcentajes de votación.

Después de repartir los votos que le regalará al Partido Verde Ecologista de México; al del Trabajo y a Nueva Alianza, este último se acercó peligrosamente al segundo lugar, con un 12 por ciento de la votación…y sin presentar más que un candidato.

Así le está yendo al PRI por regalar votos: en los distritos XIII y XIX, le dio el 100 por ciento de su votación al partido “Turquesa”, mientras que en el XVI le cedió el 100 por ciento. En otros cuatro distritos les regaló el 23 por ciento de la votación.

Y ¿qué puso el PANAL para quedarse con todo eso? un candidato de mayoría: el XIII René Frías Bencomo, nada más.

El PRI, en cambio, puso los otros 21 candidatos, 644 representantes generales y 10,283 de casilla, según cifras del Instituto Nacional Electoral.

En cambio, entre el PVEM y el PT, otros dos de los beneficiados por las dádivas electorales del PRI, 5,707, casi la mitad de los que registró el tricolor.

No sólo eso: el tricolor anunció a los cuatro vientos que iba a cargar con el gasto de las 22 campañas distritales; es decir, que sus socios no pudieron hacer mejor negocio: se quedaron con diputaciones y encima les salieron gratis.

Todo eso se debió a un cálculo ensoberbecido, según el cual podían ganar por “carro completo” o, en el peor de los casos, perder dos de las 22 diputaciones. Con ese resultado no iban a necesitar su procentaje de votación, pues no alcanzarían diputaciones plurinominales.

Vaya chasco. Ahora resulta que sus ex socios no sólo les han quitado las curules plurinominales que pudieron ganar para compensar un poco la sonora derrota, sino que éstos ya se andan acercando al PAN para hacer alianzas en la próxima legislatura.

Así de caro le salió al PRI: pagó, no ganó y ahora lo desconocen.