En quiebra, pescadores de la Boquilla claman por apoyos

**A ellos también les afecta la sequía, y les afectó gravemente la helada extraordinaria de febrero pasado. (FOTO: FROILÁN MEZA RIVERA)


En quiebra, pescadores de la Boquilla claman por apoyos

Froilán Meza Rivera
Enero de 2012, 11:04 am

San Francisco de Conchos, Chih.- En quiebra por una drástica baja de sus ingresos por la disminución de la producción, los pescadores de la Presa La Boquilla están lanzando un llamado de auxilio.

Cada temporada de frío, ellos sufren por una baja en la cantidad de ejemplares pescados, pero hay inviernos, como éste, cuando les disminuyen de manera significativa los ingresos, por las bajas temperaturas que inhiben la actividad de los peces y dificultan su captura.

Su lugar de trabajo es la presa La Boquilla, en el poblado de pescadores conocido como El Tigre. Acá vienen turistas, paseantes de fin de semana, y vienen compradores de pescado fresco. Pero la afluencia de visitantes es muy escasa en la temporada de frío. A la orilla del camino, algunos pescadores ofrecen su producto, que guardan en hieleras: "¡Pescado¡ ¡Llévele, barato!" El pregón no es atendido por los poquísimos visitantes.

Entre los productores organizados, que son los que tienen más segura la venta, en estos días, las pocas ventas y la baja producción son verdaderas calamidades. "Yo, por ejemplo, tengo 15 nasas, y en una semana obtengo 15 kilos de carpa", explicó uno de estos pescadores.

(Las nasas son trampas en forma de jaula de fácil entrada y difícil salida para la presa, que es atraída por un cebo colocado en el interior del dispositivo)

"La cooperativa me paga a 20 pesos el kilo, y son 300 pesos, digamos. Pero lo que tengo que invertir son 100 pesos por la lancha, 100 de gasolina para ir a Camargo y 200 pesos de tortillas, que son el cebo para los peces... ¿Total? Son cuatrocientos pesos de gastos, y resulta que salgo poniendo de mi bolsa 100 pesos... y mi trabajo, que también cuenta... ¡no es negocio!"

Así sufren todos. "Y no tenemos ningún apoyo, ni de la Comisión Nacional de Pesca, ni del gobierno del estado, ni de nadie... es como si no existiéramos: sabemos que hay apoyos para agricultores, para ganaderos, para todo tipo de productores agropecuarios. Y nosotros estamos en esa categoría, pero aunque también la helada extraordinaria de febrero del año pasado nos afectó, nadie se acordó de nosotros", se quejó Rafael Valles Díaz, tesorero de la cooperativa Socopelco.

Acá a La Boquilla vienen algunos restauranteros de Camargo y la región, aunque pocos, pero los principales clientes de la cooperativa son los consumidores particulares, a quienes se les pesa aquí mismo el producto, en el local a la mera orilla del agua. El black bass se vende al público en 60 pesos el kilo; el bagre azul a 45, a 40 pesos la mojarra, la carpa a 30 pesos el kilogramo, y el charal a 45.

Rafael Valles expone la situación de la cooperativa: "Mire, nosotros aquí pagamos el Seguro Social de los 30 socios, que son 8 mil 700 pesos por mes, y eso sale del pescado, pero los compañeros no siempre tienen producción suficiente".

Este gremio, entonces, está lanzando una urgente petición para que se les apliquen los programas que sí benefician a otros productores del campo.