Durante 2021, gobierno de AMLO ha destinado más recursos a Pemex y CFE

**El IMSS y el ISSSTE son las dos dependencias con mayores subejercicios en lo que va de 2021, pues acumulan 38 mil millones de pesos que no han gastado.


Durante 2021, gobierno de AMLO ha destinado más recursos a Pemex y CFE

La Crónica de Chihuahua
Mayo de 2021, 06:19 am

Ciudad de México.- En lo que va de 2021, el gobierno de Andrés Manuel López ha destinado más recursos a las empresas paraestatales Petróleos Mexicanos (Pemex) y Comisión Federal de Electricidad (CFE), esto a pesar de las pérdidas constante de dinero de estas empresas.

De acuerdo a un reporte de Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), afirma que el desglose de los ingresos muestra que Pemex y CFE aportaron 280 mil millones a la recaudación, 53.3 mil millones menos de lo estimado en la ley de ingresos. En el caso de Pemex, sus resultados estuvieron 27% por debajo de lo que se programó. Además, un cuarto de los ingresos reportados por Pemex son aportaciones patrimoniales del Gobierno Federal, es decir, dinero que el gobierno tomó del presupuesto de otras áreas y que entregó a la empresa.

Por su parte, la CFE tuvo ingresos menores por 9 mil millones de pesos, lo cual está 10% por debajo de lo presupuestado. La dinámica aquí es muy clara: como Pemex y CFE forman parte de una apuesta energética muy particular del presidente López Obrador, siguen recibiendo una cantidad extraordinaria de recursos del presupuesto del resto del gobierno sin importar las pérdidas constantes de ambas empresas. Esto necesariamente implica que, para mantener esta serie de prioridades, otras áreas de gasto están siendo descuidadas, como se detallará más adelante sobre el caso de salud.

En contraparte, a pesar de la pandemia del coronavirus, el IMSS y el ISSSTE son las dos dependencias con mayores subejercicios en lo que va de 2021, pues acumulan 38 mil millones de pesos que no han gastado. En los que va de 2021, el programa de suministro de medicamentos del ISSSTE presenta un subejercicio de 97% de su presupuesto.

Los datos oficiales de cómo se ha ejercido el presupuesto durante los primeros meses de 2021 revelan una dinámica de gasto en la que parece que la pandemia del coronavirus ya no sólo ha dejado de ser una preocupación en la discusión pública, sino que ha dejado de ser una prioridad presupuestal para el gobierno.

Aprovechando sus facultades para redireccionar de manera unilateral el presupuesto y llevarlo a destinos diferentes a los aprobados originalmente por la Cámara de Diputados, en los primeros meses de 2021 la reorientación del gasto se ha enfocado en temas energéticos, mientras hay recortes y retrasos en algunos rubros de salud, señala el informe de MCCI.

De acuerdo con el informe trimestral de las finanzas públicas, los ingresos presupuestarios al primer trimestre de 2021 ascendieron a 1.56 billones de pesos y estuvieron 5.6% por arriba de la Ley de Ingresos de la Federación (LIF). En particular, los ingresos tributarios fueron mayores a lo programado por 28.3 mil millones, lo cual podría parecer una buena noticia. Sin embargo, Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) tuvieron ingresos muy por debajo de su planeación, lo que obligará a que, para mantener su ritmo de gasto, tengan que recibir mayores recursos procedentes de otros rubros del presupuesto del gobierno, los cuales ya han comenzado a ser entregados.

Adicionalmente, la parte más importante que explica el incremento global de los ingresos no es un mayor crecimiento económico o una mejora en la recaudación, sino el uso de los pocos ahorros que quedaban en diferentes bolsas, como el Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios (FEIP), el Fondo de Salud para el Bienestar (antes llamado Fondo de Gastos Catastróficos) o el Fondo de Desastres Naturales (FONDEN).

Esta dinámica es muy clara si se consideran los diferentes rubros de ingresos y se observa que la mayor diferencia entre lo programado y lo observado corresponde a los 89 mil millones de pesos adicionales de ingresos no petroleros y no tributarios, es decir, que no tienen que ver con la producción de hidrocarburos ni con el cobro de impuestos.