Donald Trump advierte sobre una “crisis humanitaria” en la frontera para pedir dinero

**Entre sus argumentos dijo que el cruce ilegal de migrantes que supuestamente llevan drogas y violencia a Estados Unidos ha alcanzado "niveles nunca antes vistos".

La Crónica de Chihuahua
Enero de 2019, 08:26 am

The New York Times

El presidente estadounidense, Donald Trump, ofreció anoche un discurso televisado en el horario de mayor audiencia para defender sus planes migratorios y su insistencia en conseguir fondos para un muro fronterizo.

Entre sus argumentos dijo que el cruce ilegal de migrantes que supuestamente llevan drogas y violencia a Estados Unidos ha alcanzado niveles nunca antes vistos y que eso ha provocado una crisis humanitaria para el país.

Sin embargo, los datos en realidad señalan que el flujo de personas que cruzan la frontera ilegalmente lleva dos décadas en caída —ahora muchos de los que buscan cruzar están atorados en México— y que los migrantes cometen menos delitos violentos que los ciudadanos estadounidenses. Mientras que el contrabando de drogas, como el fentanilo que ha disparado las muertes por sobredosis, en su mayoría se realiza a través de puentes y cruces legales, por lo que un muro no necesariamente lo detendría.

Trump indicó que el costo por la construcción del muro recaería de forma indirecta en México por medio del nuevo acuerdo comercial trilateral T-MEC, lo que ya ha sido descartado por quienes lo negociaron. Aun así, el mandatario usó parte de su discurso para pedir dinero para el muro.

La oposición demócrata en la Cámara de Representantes se ha rehusado a avalar un plan presupuestario que prevea este dinero y Trump se ha atrincherado en su posición. Como resultado, aún no hay presupuesto y buena parte de la administración pública está cerrada u operando con pocos funcionarios; la mayoría de los empleados del gobierno no recibirán hoy la paga que se les debe y de la que dependen cientos de miles de ellos.

El gobierno mexicano no respondió anoche al discurso de Trump, aunque expresidentes y exembajadores del país criticaron sus afirmaciones, al igual que habitantes de Tijuana. México anunció sus propias medidas migratorias unas horas antes: el despliegue de más agentes en la frontera con Guatemala para intentar controlar el flujo de una nueva caravana migrante en formación.