Chihuahua, a punto de quedarse sin agua por corrupción y poca lluvia

**Por el acaparamiento de los mantos subterráneos en unas pocas manos y la corrupción que permite el tráfico de permisos y el otorgamiento de concesiones.


Chihuahua, a punto de quedarse sin agua por corrupción y poca lluvia

La Crónica de Chihuahua
Marzo de 2016, 19:30 pm

Por: Alejandro Salmón Aguilera

Los pobladores del estado de Chihuahua están a punto de quedarse sin agua, debido a la pobre precipitación pluvial que captan sus cuerpos acuíferos, pero también al acaparamiento de los mantos subterráneos en unas pocas manos y a la corrupción que permitió el tráfico de permisos y el otorgamiento de concesiones.

Datos de la Comisión Nacional del Agua y de la Semarnat indican que la región hidrológica del Río Bravo-Conchos es la que menos agua renovable cuenta, con 1,077 metros cúbicos per-cápita al año, la segunda cifra más baja del país, sólo por encima de la del Valle de México.

Según el estudio “Estadísticas del Agua en México” auspiciado por Conagua y Semarnat, la cuenta Bravo-Conchos tiene una disponibilidad de agua renovable per-cápita “preocupantemente bajo”.

En situación similar se encuentran las zonas de la Península de Baja California; Cuencas Centrales del Norte; Lerma-Santiago-Pacífico y Aguas del Valle de México.

Así mismo, esa zona hidrológica, que abastece a la mayor parte del territorio chihuahuense, percibe 438 milímetros de agua al año, una de las cifras más bajas, la cual está un 42 por ciento debajo del promedio nacional, que es de 760 milímetros, considerada de por sí muy baja.

A la poca lluvia que cae, se suma otra dificultad para recabar agua, como es la distribución mensual de la precipitación, la cual acentúa los problemas relacionados con la disponibilidad del recurso, debido a que el 68% de la precipitación normal mensual ocurre entre los meses de junio y septiembre, los meses de mayor radiación solar, lo cual provoca que el 71.6% se evapore y regrese a la atmósfera, mientras que el 22.2% se escurre por ríos o arroyos sin quedar almacenada. Del total de agua que recibe el país por medio de las lluvias, sólo el 6.2% restante se infiltra al subsuelo de forma natural y recarga los acuíferos, señala el estudio antes mencionado.

“Acaparamiento y corrupción agravan el problema”

Abordado acerca de la condición hidrológica del estado de cara al Día Mundial del Agua, Athie Flores dijo que el derroche en el campo y el desperdicio en las zonas urbanas son otros de los factores que tienen a Chihuahua al borde del colapso.

Para ejemplificar el caso, mencionó a Cuauhtémoc, una ciudad ubicada en la zona con el acuífero más sobreeexplotado del país, o Jiménez, un centro urbano que ya se quedó sin agua a causa del acaparamiento que han hecho los productores nogaleros de la región.

“Es increíble, pero en Jiménez no hay agua para las personas, pero sí para los nogales”, dijo el ex funcionario, quien afirmó que un nogal consume al día lo que tres familias completas.

Otras zonas del estado están al borde de dejar a sus habitantes sin agua porque los productores agrícolas la tienen acaparada, como el noroeste, donde se encuentran los municipios de Ahumada, Janos, Ascensión y Madera.

La única posibilidad de evitar un desastre es que se publique un decreto que declare en veda a absoluta a 22 acuíferos y en veda reservada a otros 40, dijo.

“Si no se pone freno a esta situación, vamos a ver a todas las ciudades del estado en una condición como la de Jiménez, que ya no tiene agua para sus habitantes”, advirtió Athie, quien fuera presidente de la Comisión de Agua en la Cámara de Diputados.