Alto a las agresiones de la CNTE y sus padrinos en el gobierno de Michoacán

Boletín de prensa/ Antorcha Magisterial Chihuahua


Alto a las agresiones de la CNTE y sus padrinos en el gobierno de Michoacán

La Crónica de Chihuahua
Febrero de 2015, 13:43 pm

México, D.F.- El Comité Ejecutivo Nacional de Antorcha Magisterial en el estado de Chihuahua, manifiesta su enérgico repudio a la conducta homicida de integrantes de la CNTE, quienes el pasado 3 de febrero, en complicidad con altos funcionarios de la Secretaría de Educación del Estado de Michoacán (SEE), entre quienes destaca Rafael Mendoza Castillo, subsecretario de Educación Básica y destacado integrante de ese grupo, atacaron bestialmente con garrotes, tubos de hierro a padres de familia y maestros de la escuela primaria “Juan Ortiz Murillo”, con un saldo de 24 lesionados, algunos de ellos de gravedad.

Los hechos fueron una reacción sanguinaria de esa mafia a la exigencia de la inmensa mayoría de los padres de familia de esa y otras escuelas de Morelia, de que se hiciera realidad un aspecto muy progresista de la reforma educativa federal: las Escuelas de Tiempo Completo. Los padres las reclaman y apoyan entusiastamente porque: 1) se abre la posibilidad de una mejor educación para sus hijos, ya que, si están bien aprovechadas, a más horas de trabajo (la salida de la escuela sería a las 4 de la tarde), mayor será el aprendizaje; 2) un horario más amplio de los niños en la escuela permite a los padres buscar y desempeñar un empleo para ayudar a la deteriorada economía familiar, y 3) las escuelas de tiempo completo reciben un subsidio de 10 pesos diarios para que los niños coman en la escuela y eso significa un ahorro de 2 mil pesos al año, lo cual es una cantidad considerable para la inmensa mayoría de familias mexicanas. En síntesis, los padres aceptan y exigen el “Programa Escuela Tiempo Completo” (PETC) porque significa la posibilidad de una mejor educación para sus hijos y una modesta mejoría a su vida diaria. Así de sencillo. Es el camino a una educación de excelencia y a una mejor distribución de la riqueza social. Eso es lo que defendemos los maestros antorchistas.

Los líderes de la CNTE se oponen en particular al PETC porque controlan –en complicidad con las máximas autoridades educativas de Michoacán, un “programa de escuelas integrales” que no es otra cosa que un mecanismo mediante el cual reciben cuantiosos recursos sin rendir cuentas.

Se oponen también al PETC porque tendrían que firmar una carta-convenio comprometiéndose a trabajar 200 días al año, que es el tiempo indispensable para que los niños se preparen bien.

A los verdaderos maestros, que se han decidido por el pueblo y sus aspiraciones legítimas, los han reprimido cambiándolos o castigándolos o haciéndoles la vida imposible, y a los padres que quieren una mejor educación para sus hijos y le buscan para trabajar más y ahorrarse unos cuantos pesos y enfrentar la dura situación que se vive en el país, a ellos les rompen la cabeza y la mandíbula a garrotazos, como ocurrió el 3 de febrero.

El magisterio antorchista, fiel a su compromiso de apoyar a la población en todas aquellas iniciativas y necesidades que contribuyan a mejorar la calidad de la educación, no duda ni un momento en ponerse al lado de los padres de familia, que sólo buscan lo mejor para sus hijos, y de los profesores que por apoyar a los padres de familia están siendo reprimidos por la mafia arriba señalada.

Por lo anterior, solicitamos respetuosa pero enérgicamente al gobernador de Michoacán, Doctor Salvador Jara Guerrero, que se responda positivamente a la justa petición de los padres de familia de que se aplique el Programa de Escuelas de Tiempo Completo en Michoacán, así como que ordene la intervención de las autoridades judiciales del mismo estado, a fin de detener, investigar y castigar según lo establezcan las leyes, a los individuos que el 3 de febrero intervinieron directamente en los hechos aquí expuestos, todos ellos fácilmente identificables por las oportunas fotografías, videos y audios que se han difundido por diversos medios electrónicos, así como a sus padrinos enquistados en el gobierno de Michoacán.

Estaremos muy atentos al desarrollo de los hechos en Michoacán, y dispuestos a acudir en apoyo de nuestros compañeros, si así lo exigen las circunstancias.