A ver quién le entiende a la convocatoria “Por un Chihuahua libre y justo”

**En el PRI ¡nueve actores políticos buscando una candidatura, cuando no ha terminado el penúltimo año del gobernador en turno! Eso sí que es crisis.

La Crónica de Chihuahua
Diciembre de 2015, 14:32 pm

Por: Alejandro Salmón Aguilera/ ahoramismo.mx

Difícil de entender. Es lo menos que se puede decir de la convocatoria—si así se le puede llamar—emitida ayer jueves por un grupo de conocidas personalidades del mundo político local a conformar algo, no saben aún cómo llamarle, que pretende llegar a la postulación de una candidatura independiente al Gobierno de Estado de Chihuahua y/o a la conformación de un gobierno “de coalición”. No sabemos bien a bien qué es pero ya tiene nombre: “Por un Chihuahua libre y justo”.

Que alguien lo explique, porque los informantes en la conferencia de prensa congregados ayer en el salón de actos de El Barzón no dieron pie con bola.

Hablan de llamar a una amplia consulta…cuando están encima los tiempos límites para registrar no sólo candidaturas independientes, sino también coaliciones y plataformas de campaña. Eso debieron hacerlo, cuando menos, a principios del año, no ahora que estamos a menos de dos semanas de que termine el 2015.

Plantean una candidatura común pero no tienen candidato. Vaya dilema: ya hay “independentistas” pero no independiente. A ver si se entendió: existe ya un grupo de actores políticos que conoce de sobra el mundillo de las elecciones locales y federales. Ahora sólo falta convencer a una personalidad no ligada a partido político alguno dispuesto a dedicar medio año de su vida y una cantidad indeterminada de dinero a ser candidata/o a un cargo difícil de conseguir, como es la gubernatura del estado. De entrada, se ve complicado; difícil encontrar a alguien que tenga una osadía de esas dimensiones.

La otra parte que tampoco se entiende es cómo llamar a un acuerdo “de coalición” si ninguno de los convocantes está en condiciones de dirigir un partido político. Todos ellos tendrían que pasar por la dirigencia respectiva y, así como se manejaron las cosas, no se ve cómo Mario Vázquez Robles, dirigente estatal del PAN, por citar un ejemplo, quiera ir a hablar de coaliciones o cosa que se le parezca con un grupo “plural” que no lo tomó en cuenta para lanzar esa convocatoria. Menos aún se ve cómo Víctor Quintana, hasta hace poco de Morena haga tratos con el PAN y/o con el PRD, si Andrés Manuel López Obrador, dirigente y cuasi dueño de ese partido ha repudiado una y otra vez las alianzas entre el panismo y la izquierda. ¿O ya se les olvidó el caso del Estado de México, donde tiró de un plumazo las negociaciones entre PAN y PRD para lanzar candidato de coalición al gobierno estatal?

La única explicación que le alcanza a nuestro modesto entender es que la severa crisis institucional por la cual atraviesa el estado y el país golpea también a los partidos políticos. El PAN está en una crisis de tal magnitud que Gustavo Madero, su dirigente nacional hasta hace unos meses, ahora anda “por la libre”; que Javier Corral, un senador que obtuvo su escaño por decisión de la dirigencia de su partido, tampoco la juega con su dirigencia estatal; Víctor Quintana se junta con panistas y perredistas sin importar la línea política marcada por su dirigente; Jaime García Chávez se acerca a ex dirigentes de los partidos que tanto ha defenestado.

En resumen, la organización político-electoral del estado y del país está crujiendo. Y vaya que no hemos hablado del PRI ¡nueve actores políticos buscando una candidatura, cuando no ha terminado el penúltimo año del gobernador en turno! Eso sí que es crisis.